Continúa el juicio al joven nadador de 24 años, Otto Putland, por haber abusado sexualmente de una mujer de 19 años después de una fiesta en julio de 2015 en la ciudad de Cardiff.
Aquella noche, su amigo, el atleta olímpico Ieuan Lloyd conoció a la mujer y posteriormente la llevó a su casa donde tuvieron relaciones sexuales, indicó la abogada procesal Janet McDonald en el Cardiff Crown Court.
“No tuvo ningún respeto por la mujer”, aseguró la Sra McDonald y agregó irónicamente: “como su amigo había tenido relaciones, estaba bien que el lo hiciera también”. “Se la pasaron entre amigos como si fuera de su propiedad”.
Todo tuvo lugar en la casa de Lloyd, quien representó a Gran Bretaña en los últimos Juegos Olímpicos, según recuerda la víctima. El jurado escuchó los recuerdos de la joven, la cual aseguraba que vio al atleta levantándose de la cama, saliendo de la habitación y conversando con Putland.
Al poco tiempo, el oriundo de Dinedor, ya estaba a los pies de la cama, mientras Lloyd esperaba en el pasillo.
“Cuando comenzó a quitarse la ropa, fue cuando le envié un mensaje de texto a mi amiga diciéndole ‘ayuda antes que algo suceda'”, confesaba la mujer que hoy tiene poco más de 22 años.
“Él se acostó encima de mí y fue entonces cuando le dije ‘no te pases de largo’ y él dijo ‘no nos estamos pasando’. Le dije que no quería tener sexo con él y él siguió tratando de besarme”, recordaba.
McDonald afirmó que aquella noche, su clienta había dejado en claro que no quería tener sexo con Putland.
“Él dijo ‘¿quieres que me ponga un condón?’ Así que fue y agarró uno y se lo puso”, explicaba. Al volver, la joven “estaba llorando y simplemente mantenía mi cabeza lejos de él”.
“Me quitó la mano y simplemente me la puso pero me dijo ‘no te preocupes, es solo la punta'”, soltó entre lágrimas. Finalmente, la abogada relató que el nadador se detuvo cuando su cliente le pidió ir al baño. Fue desde allí donde llamó a una amiga.
Janet McDonald también mencionó que algunos amigos de la joven acudieron a la casa tras recibir varios mensajes y se encontraron con Lloyd y el agresor en el pasillo.
La víctima, quien se fue con una amiga en un taxi, visitó dos días después de aquella noche a un médico forense. Sin embargo no informó sobre lo que había vivido a la policía hasta noviembre del 2016, debido a que no quería que su madre supiera lo que había ocurrido.
Christopher Rees, abogado del nadador de 24 años interrogó a la mujer, quien dijo que estaba “realmente borracha”, producto de haber ingerido medio litro de “Malibú y Vodka”, pero que sin embargo, podía recordar la mayor parte de esa noche.
“Seguramente hubo lagunas en su memoria cuando denunció lo sucedido a la policía 18 meses después”, supuso Ress y preguntó por qué ella no decidió levantarse cuando su cliente entró a la habitación.
“Me congelé. No estoy segura … No estaba pensando correctamente. No estaba segura de qué iba a suceder exactamente en ese momento”, respondió la mujer.
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FUENTE: INFOBAE NOTICIAS
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