Este miércoles 19 de julio se dará inicio a la llamada Tercera Toma de Lima, manifestación que congregaría a ciudadanos de todas las regiones que reclaman la renuncia de Dina Boluarte, la convocatoria de nuevas elecciones, la instalación de una Asamblea Constituyente y la liberación del expresidente Pedro Castillo. Las fuerzas del orden y autoridades municipales se prepararán para la llegada de manifestantes.
Las organizaciones civiles que participarán de las protestas han hecho público su deseo de llevar a cabo su actividad en las zonas que comprenden el Centro Histórico de Lima; sin embargo, a inicios de este año la Municipalidad Metropolitana de Lima dispuso declarar como zona intangible esta zona de la capital. Es decir, quedan prohibidas las manifestaciones y actividades que pongan en riesgo los espacios públicos.
Los puntos límites de la zona intangible son la avenida 28 de julio, la avenida Guzmán Blanco, avenida Brasil, avenida Arica, avenida Alfonso Ugarte, plaza Dos de mayo, plaza Ramón Castillo, estación Caquetá del Metropolitano, avenida Alcázar, Alameda de Los descalzos, avenida Plácido Jiménez, el cuartel militar, la vía expresa Grau y la avenida Paseo de la República que limita con el distrito de La Victoria.
La medida adoptada por la comuna limeña se justifica en sus intentos por proteger áreas históricas como la Plaza Mayor de Lima y la Plaza San Martín, epicentro de diversas manifestaciones políticas. En el área también se encuentra el Congreso de la República, Teatro Municipal, Teatro Segura, la plaza Bolívar, la Biblioteca Nacional del Perú y distintos conventos e iglesias que datan de la época colonial.
Convocatoria realizada
Desde la Central unitaria de Trabajadores del Perú (CUT), Julio César Bazán ha señalado que se espera la participación de más de 20 mil ciudadanos en las manifestaciones contra el gobierno de turno. Sin embargo, este número no puede ser confirmado dada la campaña de “satanización de la Policía Nacional del Perú contra los dirigentes que convocan a la movilización”.
“Van a regresar a Lima las regiones de Puno, Cusco y Arequipa”, dijo el presidente del CUT a América para luego confirmar que esta vez se sumarán a las manifestaciones ciudadanas de la macrorregión norte del Perú. Este recalcó que se trata de una actividad en la que no participan organizaciones políticas de centro o izquierda, sino que solo incluye a personas integrantes de asociaciones civiles de todo tipo.
Desde la Municipalidad Metropolitana de Lima se ha anunciado el uso de inteligencia artificial para el reconocimiento de presuntas actividades violentas durante las marchas. Representantes de la autoridad edil explicaron que las cámaras de seguridad registran movimientos bruscos, lo que les permitiría identificar a aquellas personas que apelan a los actos vandálicos en desarrollo de su derecho a la protesta.
Las cámaras también tienen a su disposición la base de datos de la Policía Nacional del Perú (PNP) de las personas más buscadas en el Perú. Estas reconocerán los rasgos físicos de los manifestantes y compararlas con la información entregada por las autoridades. Al hallar compatibilidad, se emitirá una alerta a las autoridades para proceder con la captura.
La Municipalidad Metropolitana de Lima, liderada por Rafael López Aliaga anunció que multará con S/.4.950 a todos aquellos que realicen una actividad o evento en la vía pública sin autorización. El anuncio ha sido confirmado por la Gerencia de Movilidad Urbana a partir del desarrollo de la Tercera Toma de Lima que iniciará el 19 de julio.
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