El 28 de septiembre de 2005 se sancionó la Ley 26.061 de Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes que creó la figura del Defensor de menores en la Argentina. En su artículo 47, la norma establece que “tendrá a su cargo velar por la protección y promoción de sus derechos consagrados en la Constitución Nacional, la Convención sobre los Derechos del Niño y las leyes nacionales”.
En 2015, un grupo de reconocidas ONG que protegen la infancia se unieron en un colectivo con el objetivo común de defender los derechos e intereses de los niños y conformaron la coalición Infancia en Deuda para impulsar la campaña #DefensorDelNiñoYa!, en reclamo del nombramiento urgente del Defensor.
Pasaron 12 años desde que se sancionó la ley y solo un recurso de amparo presentado por el colectivo Infancia en Deuda, logró que se pusiera sobre tablas la necesidad de nombrar al Defensor de Niños. Así, en marzo de este año, tras la sentencia judicial se conformó la Comisión Bicameral del Congreso que debe proceder a la designación del Defensor por concurso público. Si bien hace unas semanas se abrió la inscripción para aspirantes idóneos para ocupar el cargo, aún no está claro cuándo será designado y se teme que el nombramiento se postergue hasta el inicio de las próximas sesiones legislativas, en marzo del año que viene.
Mientras tanto, en la Argentina cerca del 47% de los menores de 18 años viven en situación de pobreza. En este contexto Infobae consultó a integrantes de ese colectivo sobre la necesidad e importancia del nombramiento.
“En Argentina —y esto no es una excepción de lo que pasa en los países de la región— concentramos las peores condiciones en la infancia y esto se ve en diversidad de los indicadores, pero probablemente el más claro sea el indicador de pobreza”, aseguró Gala Díaz Langou, directora del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec). Según esos datos las cifras son alarmantes: “Vemos que uno de cada tres argentinos vive en esa situación a nivel general, pero cuando separamos a niños y adultos nos damos cuenta de que si hablamos de adultos, uno de cada cinco vive en la pobreza, y si hablamos de niños, uno cada dos está en esa condición. Es la mitad de los niños. Casi el 47% de los menores de 18 años viven hoy en Argentina en situación de pobreza”.
“Esta concentración de la pobreza en la infancia —siguió Díaz Langou— es conocida como ‘Infantilización de la pobreza’ y se fue profundizando con el correr de los años, y cada vez es peor la brecha que existe entre la pobreza en la infancia y durante la edad adulta. En este contexto la figura del Defensor del Niño puede contribuir a revertir la situación por su función de monitoreo de las políticas públicas y de la situación social“.
Por su parte, Sebastián Vázquez, de Fundación Sur, recordó que “la ley establecía 90 días de plazo para la designación pero el cargo permaneció vacante durante 12 años y el proceso de selección y nombramiento se reactivó gracias a la lucha, el compromiso y las campañas de concientización encaradas por las organizaciones de la sociedad civil especializadas en la protección y defensa de los derechos de la infancia y la adolescencia”.
La importancia de un defensor de la infancia
Según Díaz Langou el rol de esta figura “será tener mayor diálogo con el sistema político en general y la política pública en particular”. Además, considera que “deberá abogar porque las políticas busquen garantizar los derechos de la infancia y que realmente los garanticen” para cerrar la brecha entre lo que hoy establecen las leyes de la infancia con lo que ocurre en la realidad. “También tiene la función de ir generando información e ir visibilizando algunos casos que puedan contribuir a promover políticas que aún no existen y que puedan ayudar a ir cerrando esas brechas. Estamos solicitando que todo el proceso se realice con audiencias abiertas para que las organizaciones y las personas que trabajan con la infancia puedan estar y participar, pero no se sabe concretamente cómo será este proceso de selección”.
Pero no solo se desconoce cómo será la selección sino también cuándo se realizará. Y esto genera preocupación:”Hay que tratar de hacer este proceso lo más rápido posible porque los días pasan y los derechos de los niños siguen estando vulnerados en Argentina“, subrayó la representante de Cippec.
Respecto del rol del Defensor del Niño, Vázquez destacó que “es fundamental que sea riguroso técnicamente y autónomo del Poder Ejecutivo, tanto nacional como provincial, porque deberá controlarlos. Y que tenga una gran trayectoria, por el principio de especialidad técnica que establece la Convención de los derechos del Niño, Niñas y Adolescentes”.
Respecto a la selección de la figura arguyó que es necesario que se establezca el parámetro para “tener un orden de mérito como en cualquier concurso y que sea lo más objetiva posible, ya que esa sería una herramienta importantísma para defender a los niños porque ninguna de las que tenemos hoy son suficientes por sí mismas. Inclusive la ley no lo es, porque a veces nos encontramos con una buena ley pero con una mala aplicación o un mal control. El abogado y el defensor del niño no resuelven la problemática, pero vienen a paliar situaciones desiguales en un ámbito federal y si se la logra establecer como una institución de control real estaremos muy atentos a su desempeño”.
El período de duración del cargo de Defensor de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes es de 5 (cinco) años y el procedimiento para la inscripción de los postulantes está disponible hasta el 7 de este mes en el sitio web.
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FUENTE: INFOBAE NOTICIAS
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