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Por Claudia Martini y Miguel Lo Bianco
BUENOS AIRES, 14 dic (Reuters) – Los argentinos estaban en las nubes el miércoles, en el embriagador día después del triunfo en el Mundial de fútbol que dejó al país la chance de ganar el domingo el torneo por primera vez desde la victoria del equipo liderado por Diego Maradona en 1986.
Los sudamericanos, dos veces campeones de la Copa del Mundo, golearon a Croacia 3-0 el martes, lo que sacó a miles de hinchas a las calles de Buenos Aires vestidos con camisetas y banderas argentinas, además de carteles con la imagen de Maradona y del ídolo del momento, Lionel Messi.
Luego de un flojo comienzo en el Mundial de Qatar, cuando perdió inesperadamente ante Arabia Saudita en su primer partido, el derrotero de Argentina hacia la victoria ha cobrado impulso, atrayendo a enormes multitudes a los estadios en Doha y en el país, donde la ilusión de los aficionados no para de crecer.
“Se te para el corazón, se te para el mundo”, dijo a Reuters Televisión Lucía González, una estudiante de 19 años de Buenos Aires, mientras caminaba por las calles de la capital.
“Juega la selección y se para el mundo, no ves un alma en la calle, escuchás los gritos de todos, las canciones, ver cómo alientan a la selección, ver que aunque ganemos o perdamos, ya nos sentimos campeones y eso para mí es un montón, llegar a la final es un montón, es una alegría que te borra todo”, agregó.
El país de unos 45 millones de habitantes ha venido sufriendo un turbulento período económico, con una inflación cercana al 100%, altos niveles de pobreza y crisis cambiaria y de deuda que afectan el crecimiento económico y las inversiones.
Pero el fútbol está ofreciendo a muchos una manera de olvidar sus problemas, en una nación donde el fallecido astro Maradona sigue siendo reverenciado en enormes murales y tatuajes y donde Messi está comenzando a alcanzar el mismo estatus con brillantes actuaciones que hacen avanzar al equipo.
“La verdad es que el país está en una situación muy difícil, así que es un alivio mismo para el corazón de todos los argentinos y nos hace olvidar un poquito de todos los problemas que tenemos día a día los argentinos”, dijo Mauro González, un empleado de 29 años.
La aerolínea de bandera dijo que los argentinos agotaron el miércoles dos nuevos vuelos que ofreció para llevar a los hinchas que sueñan con ver triunfar a su equipo. Argentina jugará con Francia o Marruecos, quienes compiten más tarde por un lugar en la final.
“Qué te puedo decir, no tiene explicación, es algo muy emocionante”, dijo el hincha argentino Javier Dure. “Lo que la selección está haciendo ahora es increíble”, agregó.
(Reporte de Claudia Martini y Miguel Lo Bianco. Escrito por Adam Jourdan. Traducido por Lucila Sigal; Editado por Nicolás Misculin)
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