Madrid, 6 ene (EFE).- El descenso de temperaturas ha traído este sábado de Reyes lluvia y algunas nevadas en el norte peninsular, que han causado cortes de tráfico en la red secundaria y el cierre de puertos de montaña en Castilla y León, Cantabria, Navarra o Asturias.
La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) había activado para este fin de semana la alerta amarilla (riesgo) por nieve por primera vez este año y hoy el aviso se extiende a ocho comunidades autónomas: Aragón, Asturias, Cantabria, Castilla y León, Cataluña, Navarra, el País Vasco y La Rioja, con espesores de hasta 10 centímetros.
Además, Cataluña, Comunidad Valenciana y Baleares están en aviso naranja (riesgo importante) por vientos fuertes y fenómenos costeros.
En Castilla y León la nieve ha obligado a usar cadenas o neumáticos de invierno e impide circular a camiones y autobuses por nueve tramos viarios, ocho de ellos en León, además de haber uno cortado por hielo en Salamanca, según la Dirección General de Tráfico.
En Navarra está cortado al tráfico el puerto de Belagua y son necesarias cadenas en San Miguel de Aralar.
En Asturias la nieve mantiene cerrado al tráfico de camiones el puerto de Pajares (N-630), mientras que el resto de vehículos deben utilizar cadenas, al igual que en otros diez altos de la red secundaria de carreteras del Principado, donde permanecen totalmente cerrados otros cinco.
En Cantabria está dificultando la circulación en el puerto de San Glorio (N-621) y en Brañavieja (CA-183), donde la DGT ha prohibido el tránsito de autobuses, camiones y articulados y ha establecido la obligatoriedad del uso de cadenas o neumáticos de invierno.
Por otro lado el fuerte viento de mestral que sopla en la Comunitat Valenciana ha dejado en el Maestrat y zonas cercanas de la provincia de Castellón, rachas de hasta 169 kilómetros por hora.
La Aemet había anunciado para este fin de semana la entrada de una masa polar que ha hecho descender la cota de nieve a entre los 800 y los 1.200 metros en montañas del extremo norte y el sureste peninsular, hasta los 400/700 metros en Pirineos, y hasta los 700/900 en montañas del centro y centro norte.
Los termómetros han caído por debajo de los cero grados en Madrid, Burgos, Ávila, Palencia, Segovia, Salamanca, Cuenca y Teruel y se han registrado precipitaciones en el área cantábrica, alto Ebro, norte de la Ibérica y Pirineos.
Para mañana domingo se esperan precipitaciones localmente persistentes en el Cantábrico oriental, nevadas en Pirineos, Navarra y País Vasco e intervalos de viento fuerte y rachas muy fuertes en zonas del noreste peninsular y en Baleares.
Las temperaturas máximas descenderán en el nordeste peninsular, aumentarán en el entorno de las Béticas y experimentarán pocos cambios en el resto, con predominio de ascensos en la mitad occidental y descensos en la mitad oriental.
Las mínimas irán en descenso, con heladas débiles en amplias zonas del interior peninsular, exceptuando en el extremo sudoeste, Levante y Ebro y más intensas en montaña, especialmente en Pirineos. EFE
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