¿Por qué los grupos criminales atacan las tiendas Oxxo? Estos serían los motivos

Este lunes la cadena de tiendas Oxxo dio a conocer que ha decidido cerrar temporalmente las 191 sucursales que operaba en Nuevo Laredo, Tamaulipas, debido a las condiciones de inseguridad que prevalecen en la región.

La empresa informó a sus colaboradores a través de un comunicado interno que las tiendas permanecerán cerradas hasta que puedan garantizar la seguridad para sus empleados.

Roberto Campa, director de Asuntos Corporativos de Fomento Económico Mexicano (Femsa), explicó en entrevista con La Jornada que esta decisión fue motivada por las demandas de grupos criminales, que imponían la compra de gasolina a ciertos distribuidores, horarios de servicio y variaciones de precios. Campa también mencionó que dos colaboradores fueron retenidos para obtener información de la empresa, lo que incrementó la preocupación por la seguridad.

La comunicación interna asegura que el salario y las prestaciones de los empleados no se verán afectados durante el cierre y reafirma el compromiso de la empresa con la seguridad de su personal.

Como reacción al cierre, el vocero de Seguridad de Tamaulipas, Jorge Cuéllar Montoya, declaró a Telediario Radio que se realizarán reuniones con directivos de Femsa, el secretario de Gobierno, de Seguridad Pública y un representante de la Fiscalía para encontrar soluciones. Además, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ha enviado a más de 100 efectivos al área de Nuevo Laredo para reforzar las labores de seguridad y permitir que las tiendas puedan reanudar operaciones.

El cierre se había originado de manera paulatina, comenzando el 25 de julio de 2024, según reportes de redes sociales. Aunque inicialmente hubo versiones que atribuían el cierre a problemas con el software de la cadena, finalmente se confirmó que la razón oficial fue la inseguridad.

¿Por qué el narco ataca las tiendas Oxxo?

El ataque a las tiendas Oxxo no es algo nuevo pues se han registrado desde hace varios años, algunos con más incidencias que otros, como en el 2022, cuando hubo una ola de violencia en estados como Guanajuato y Chihuahua.

Según Javier Tejado Dondé, en una columna publicada hace dos años en El Universal, estas acciones violentas reflejan varios factores que explican por qué el crimen organizado se ensaña con estos establecimientos.

Oxxo, con su red de más de 20 mil tiendas en todo el país, “no tiene seguridad privada y tampoco paga derecho de piso” según señala Tejado Dondé, situaciones que los convierten en un blanco atractivo y susceptible para los criminales. Además, dado su gran número y distribución, “prácticamente en cada par de cuadras hay una de ellas”.

Otro factor es la visibilidad que estos ataques otorgan al crimen organizado. Tejado Dondé sostiene que “la quema de estas tiendas le dará cobertura mediática” y envía una señal clara a las autoridades y a todos los comercios sobre el alcance de su poder. La cobertura en los medios actúa como una herramienta de intimidación y control.

El argumento más convincente, según Tejado Dondé, es que Oxxo se niega a pagar extorsiones, lo que crea una dinámica compleja con las tiendas que sí lo hacen. “Sacar estas tiendas de operación hace que otras que sí pagan derecho de piso se vean beneficiadas con esta transferencia de clientes”, explicó.

La falta de un Estado de derecho sólido se hace evidente en este contexto. El columnista indica que esta situación se extiende desde Sonora hasta Tamaulipas, pasando por el Bajío y alcanzando ciudades cercanas a la CDMX como Valle de Bravo y Malinalco.