El presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) de la Cámara de Diputados, Ignacio Mier Velazco, aceptó la demandas del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TPJF) para nombrar a una mujer como la nueva presidenta del Instituto Nacional Electoral (INE) al terminó de funciones de Lorenzo Córdova Vianello.
Luego de que se efectuara una reunión entre los de integrantes de la Jucopo y magistrados del Tribunal Electoral este 23 de marzo, los diputados anunciaron que pese a las diferencias que se habían presentado, los acuerdos para designar a una mujer como la nueva presidenta del Consejo General del INE se acatarán.
De acuerdo con el presidente de la Jucopo, ésta decisión demuestra la “vocación y la actitud de los grupos parlamentarios” para atender los asuntos de paridad de género, sobre todo ante los recientes cargos públicos a renovar el próximo 3 de abril en el INE.
La Junta de Coordinación Política pidió al Comité Técnico del Evaluación que emitiera una lista con los nombres de las cinco aspirantes para el cargo a presidencia, una vez que la convocatoria sea aprobada por el pleno.
“Esta decisión trascendental de las fuerzas políticas representadas en la H. Cámara de Diputados permitirá que en la próxima conformación del Consejo General del Instituto Nacional Electoral haya paridad y sea una mujer quien encabece dicho órgano constitucional autónomo”, destacó el comunicado de la Jucopo.
Por qué una mujer como presidenta y no un hombre
El pasado 22 de febrero, la magistradas y magistrados modificaron la convocatoria emitida por la Cámara de Diputados para elección de nuevos consejeros electorales. En este sentido los integrantes del TPFJ ordenaron que la quinteta de aspirantes para el puesto presidencial del INE sea conformada exclusivamente por mujeres.
Esta iniciativa fue impulsada por la magistrada de Janine Otálora, quien señaló que desde la creación del órgano electoral mexicano, antes Instituto Electoral Federal (IFE), en el año de 1999, todos sus titulares (12) han sido hombres y sólo de manera provisional se han designado mujeres.
La propuesta para el modificación a la convocatoria por paridad de género fue votada a favor por las magistradas Janine Otálora y Mónica Soto, de igual manera la iniciativa fue aceptada por los magistrados Reyes Rodríguez Mondragón, Felipe de la Mata.
La noticia fue celebrada dentro y fuera del órgano electoral, sobre todo por las consejeras y funcionarias de la dependencia. Tal fue el caso de la consejera Norma De la Cruz, quien indicó que la paridad de género ya es un mandato constitucional, no solo para los órganos de elección, sino también para todas las instituciones del Estado mexicano.
Fue en entrevista con el medio Milenio que la consejera De la Cruz destacó las recientes decisiones del Tribunal Electoral, las cuales consideró como una buena oportunidad para de hacer el ejercicio de paridad en el órgano electoral, el cual podría entrar en una “nueva era” con la presidencia de una mujer.
Sin embargo, De la Cruz explicó que la designación de la nueva titular electoral debería representar un análisis al Instituto Electoral para atender los temas desde una visión horizontal.
La paridad de género hace referencia a una participación y representación equilibrada en los puestos de poder y de toma de decisiones, en espacial en la esfera política, económica y social. Esto ha sido un logro para la participación democrática del país, pues esta asegura un mayor apertura en los espacios para las mujeres.
La paridad de género se considera como un indicador para medir la calidad democrática en los países, sobre todo hacía una igualdad política y en derechos humanos.
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