(Foto: archivo) (Nenov/)
Dos bebés fueron rescatados este jueves 25 de agosto en el desierto de Arizona, por agentes de la Patrulla Fronteriza del sector Tucson. Los menores habían sido abandonados a su suerte en las inmediaciones del Parque Nacional Organ Pipe Cactus.
Según el primer estudio a los infantes, se determinó que uno de ellos tenía cuatro meses y el otro dieciocho meses de edad, su resguardo se logró después de la detención de un grupo de inmigrantes que cruzaron la frontera por el oeste del puerto de ingreso de Lukeville, Arizona, muy cerca de una de las entradas del Monumento Nacional Organ Pipe.
Fue entonces que uno de los detenidos informó a las autoridades de inmigración sobre los niños, quienes habían sido dejados dentro del parque. Inmediatamente los agentes de la Patrulla Fronteriza se dirigieron al lugar y hallaron a uno de los bebés llorando y el otro que estaba boca abajo parecía no moverse, detalló la agencia federal en un comunicado.
Ante tal escena los agentes se movilizaron rápidamente y le proporcionaron primeros auxilios al infante de cuatro meses mientras arribaban al lugar los paramédicos. De acuerdo a las primeras declaraciones de uno del jede de la Patrulla Fronteriza, John Modlin comentó que los traficantes de personas, mejor conocidos como “coyotes” o “polleros” fueron quienes dejaron a los dos pequeños en el desierto “para morir”.
“Ayer los contrabandistas dejaron a dos niños pequeños en el Desierto de Sonora a su suerte. Este no es solo un ejemplo más de cómo los traficantes están explotando a los migrantes por dinero, sino de su crueldad y su avaricia”, aseguró Modlin.
Hasta el momento la identidad y nacionalidad de los padres de ambos bebés se desconoce, sin embargo ya fueron trasladados a un hospital en Goodyear, para su evaluación médica y para que posteriormente sean dados de alta. Los niños quedaron bajo la custodia de la Patrulla Fronteriza, quien ya solicitó a la Oficina de Reasentamiento y Refugiados (ORR), la cual supervisa la atención de niños migrantes recogidos en Estados Unidos sin sus familiares, los reciba de inmediato para su atención.
El Sector Tucson de la Patrulla Fronteriza informó que se ha incremento un 12% el número de niños sin acompañantes que son contrabandeados a través de la frontera en el último año. Esto recuerda dos terribles casos de niños migrantes que ocurrieron durante esta semana, quienes murieron ahogados en el Río Grande, y un bebé de dos meses que permanece hospitalizado después de haber sido rescatado del río.
El sitio por donde cruzan la frontera los migrantes es sumamente peligroso y arriesgan su vida, en este caso el Parque Nacional Organ Pipe Cactus se extiende a lo largo de la frontera con México en el suroeste de Arizona. Se trata de un paisaje lleno de maleza y árido, repleto de enormes cactus y otra flora del desierto. Se ubica a unos 210 kilómetros (130 millas) al suroeste de Phoenix.
(Foto: AP)
Debido a su lejanía, el parque de 1.340 kilómetros cuadrados (517 millas cuadradas) es una zona recurrida por algunos contrabandistas para cruzar la frontera. Frecuentemente se hallan en el área cadáveres de personas que la cruzan ilegalmente.
Aunque las temperaturas en el Parque Nacional Organ Pipe Cactus normalmente superan los 37 grados Celsius (100 °Fahrenheit) en el verano, el jueves la temperatura era de poco más de 32 °C ( 90 °F) debido a un clima monzónico más fresco.
(Con información de EFE y AP)
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