Berlín, 23 nov (EFE).- El ministro alemán de Finanzas, Christian Lindner, anunció hoy que presentará un presupuesto suplementario para 2023 para dar seguridad legal al gasto público, que ha quedado al descubierto después de que el Tribunal Constitucional declarase nulo el traspaso de 60.000 millones de euros a un fondo para la transformación económica.
La decisión ha sido tomada en coordinación con el canciller alemán, Olaf Scholz, y con el vicecanciller y ministro de Economía, Robert Habeck, dijo Lindner en una breve comparecencia en Berlín.
Un presupuesto suplementario es necesario para “dar una base constitucionalmente sólida” a las subvenciones al precio de la electricidad y del gas, señaló el ministro, del Partido Liberal.
Lindner evitó explicar si, tal y como es de prever, la maniobra para contraer deuda adicional requerirá declarar una situación de emergencia para suspender, otro año más, el conocido como freno de la deuda.
“Mi tarea es hacer ahora tabla rasa. Podremos hablar sobre (los presupuestos de) 2024 si tenemos una situación legalmente segura”, concluyó.
El fallo del Constitucional ha dejado un agujero en los presupuestos que va mucho más allá de los 60.000 millones de euros en cuestión -pues estos están relacionados con otras inversiones- y está obligando al Gobierno revisar todos los presupuestos extraordinarios que están operativos.
Tal y como recordó Lindner, se trata de la primera vez que el Tribunal con sede en Karlsruhe (sur) se pronuncia “de forma integral” sobre el mecanismo de freno de la deuda -que limita el déficit anual al 0,35 por ciento del PIB salvo en ocasiones de fuerza mayor-.
“Ofrece claridad legal sobre cómo gestionar los presupuestos extraordinarios. Estamos sacando consecuencias”, afirmó el líder de los liberales, un partido que ha hecho de la solidez fiscal una de sus enseñas.
En reacción a la sentencia, que halló injustificado el traspaso de créditos contraídos de forma extraordinaria a causa de la pandemia en 2021 al Fondo para el Clima y la Transformación (EKT) en 2022, el Gobierno congeló como primer paso ese presupuesto.
Esta semana decidió bloquear también el Fondo de Estabilización Financiera (WSF), rellenado de forma similar, así como los presupuestos para lo que queda de 2023.
Mientras, en el Bundestag (cámara baja del Parlamento), se aplazó el debate sobre los presupuestos de 2024, lo que abre la puerta a que no sea posible completar el trámite parlamentario antes de que termine el año.
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