Por Colin Packham y Renju Jose
CANBERRA, 11 ago (Reuters) – Melbourne, la segunda ciudad más grande de Australia, permanecerá confinada por segunda semana tras registrar 20 nuevos casos de COVID-19 en su lucha por erradicar los contagios causados por la variante delta, altamente infecciosa.
Estaba previsto que Melbourne saliera del confinamiento el jueves, el sexto cierre para sus cinco millones de habitantes, en una lucha sin tregua contra el coronavirus que también se ha visto en otros lugares del país y que ha desatado la frustración y la discordia.
Sin embargo, el primer ministro del estado de Victoria, Dan Andrews, confirmó que se mantendrán las estrictas órdenes de permanencia en casa hasta al menos el 19 de agosto, después de que las autoridades no hayan podido averiguar cómo se contagiaron varias de las 20 personas confirmadas como nuevos casos el miércoles.
Está previsto que Sídney permanezca bajo confinamiento hasta finales de agosto. La mayoría espera que las restricciones se amplíen, a pesar del reciente aumento de personas que desean vacunarse.
Hasta ahora, Australia ha salido mucho mejor parada que muchos otros países del mundo desarrollado durante la pandemia, con algo menos de 37.000 casos de COVID-19. El número de muertos aumentó a 944 el miércoles, después de que dos personas, entre ellas un hombre de 30 años, murieran en Sídney.
Sin embargo, con menos del 25% del país totalmente vacunado, Australia está teniendo problemas para evitar unos cierres que según algunos analistas podrían llevar a la economía australiana, la decimotercera del mundo según el Fondo Monetario Internacional, a una segunda recesión en otros tantos años.
Los Gobiernos federal y estatales se han comprometido a poner fin a los confinamientos cuando el 70% de los casi 26 millones de habitantes del país estén vacunados.
(Reporte de Renju Jose; Edición de Jane Wardell y Kenneth Maxwell, traducido por Michael Susin)
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