Luego del fallo de la Corte Constitucional contra el colegio Helvetia de Bogotá, por actuar de manera “pasiva” y “negligente” a pesar de las “pruebas contundentes” de acoso escolar hacia un menor de 12 años que vio afectada su salud mental y física por cuenta de los maltratos a los que estaba siendo sometido por parte de sus compañeros de estudio, surgieron nuevamente interrogantes como ¿Qué deben hacer los padres en caso de que sus hijos se han víctimas de bullying? y ¿cuáles son las rutas de atención que deben seguir las escuelas para garantizar los derechos y la protección de los menores?
Para responder esas y otras preguntas como ¿Qué puede hacer un padre de familia si identifica que su hijo es el acosador? o ¿Cómo reconocer si un niño es víctima de bullying?, el psicólogo de la Universidad de los Andes, consultor en educación socioemocional y actual director del programa Aulas en Paz, José Fernando Mejía, habló con Infobae Colombia para construir una pequeña guía básica para que padres, docentes y niños sepan cómo distinguir de manera oportuna cuando un menor es víctima de acoso escolar o, en dado caso, es el acosador, y conocer de antemano el camino a seguir.
– ¿Qué es el acoso escolar o bullying y de qué formas se presenta?
De acuerdo con Mejía, el acoso escolar es un tipo de agresión que ocurre de manera sistemática y repetida entre grupos donde hay diferencia de poder.
“En un colegio tú puedes identificar quiénes son los más y los menos poderosos por cosas relacionadas con el prestigio, por su habilidad social, académica u otras cosas. Por el otro lado, están los más vulnerables, que son por ejemplo aquellas personas que les cuesta establecer relaciones, que son diferentes -porque cualquier cosa que me haga diferente me pone en riesgo de ser excluido-, y esas personas con las que a veces es difícil relacionarse, que son tímidas o que tienen diferentes dificultades para estar con otros. (…) La relación entre estos dos extremos es donde se producen las agresiones”, explicó el especialista a este medio.
Burlas, comentarios malintencionados o golpes, son algunas de las formas en la que según el director de Aulas en Paz, se puede evidenciar el acoso escolar, que incluso puede llegar a trasgredir las barreras digitales hasta terminar convirtiéndose en el llamado ciberbullying.
– ¿Y una burla o “broma” se puede calificar como bullying?
Para Mejía, una burla o una broma si se puede considerar como bullying siempre y cuando cumpla con los criterios de: repetición, sistematicidad y desbalance de poder. “Esto (el acoso) tiene que haber ocurrido muchas veces, usualmente esto se da por semanas meses o años”, además de que sea una misma persona o personas las que agredan a un mismo menor.
– ¿Qué signos muestra un niño o niña que es víctima de acoso escolar?
Debido a qué es una situación difícil de identificar, ya que según explica Mejía “ese desbalance de poder hace que las víctimas no pidan ayuda”, sostiene es necesario “afinar los ojos para poder verlo”. En el caso de los profesores, el psicólogo de la Universidad de los Andes señaló a este medio que es necesario que identifiquen “quienes son los niños poderosos y quiénes los vulnerables”.
“Para los papás y mamás, tienen que tienen que estar atentos de cómo se relaciona su hijo en el curso, con quién está reunido, si mi hijo o hija está solo, no tiene amigos, y si de alguna manera lo dejan por fuera de todo. Si tiene problemas para relacionarse o cambios de humor y si se vuelve un poco más ansioso. (…) Si no quiere ir al colegio o si se inventa cosas para no ir. (…) Si llega con las cosas dañadas o se le pierden todo el tiempo, o si tiene cambios en la alimentación y el sueño, y si están especialmente tristes”, detalló a Infobae.
Según el experto, los niños más pequeños incluso pueden estar más indisciplinados y “retadores”, lo que puede ser una clara alerta de que el menor podría estar siendo víctima de bullying.
El bajo rendimiento académico también puede ser otro signo de alarma, “especialmente si cambia, es decir, si a un niño le iba bien y de repente comienza a irle mal”.
– ¿Cómo identifico si una niña o niño es el acosador?
De acuerdo con el especialista, los pequeños que pueden llegar a tener tendencias de ser acosadores de otros niños son aquellos “especialmente burlones, que disfrutan haciendo bromas pesadas”. “Son niños muy poderosos y líderes que a veces pueden abusar de su poder”, subrayó Mejía en su diálogo con este medio.
– Si soy padre o madre, ¿qué ruta de atención debo seguir para tratar el caso?
Si usted identifica que en un niño o niña, ya sea su hijo o no, es víctima de bullying en el colegio, el primer paso que debe seguir, de acuerdo con Mejía, es informar de manera inmediata a la institución.
“Tratar de no comunicarse con las otras familias, eso empeora siempre la situación. Comunicarse inmediatamente con los colegios, estos tienen protocolos que deben activarse, si no se activan recurrir al mecanismo y al conducto regular de la institución para escalar el caso si es posible”, subrayó Mejía.
El experto agregó que, aunque cada colegio tiene un protocolo distinto, hay unos lineamientos generales establecidos por el Ministerio de Educación que cada institución escolar debe seguir.
“La Ley 1620 establece que cuando ocurren los casos de bullying los colegios deben fortalecer los mecanismos de prevención y promoción –desarrollo socioemocional y la construcción óptima de aula-. Cuando ya hay un caso hay que proteger a la víctima y hacer cosas para restablecer sus derechos, comunicarse con las familias y seguir un protocolo a través del comité escolar de convivencia en donde usualmente hay una ruta de atención en la que se trabaja la salud mental y física de las personas. Además, hay comunicación con las familias, y un plan de atención en el caso que la agresión haya escalado porque se debe involucrar a las autoridades competentes, como por ejemplo el Instituto de Bienestar Familiar (Icbf) o la Policía de Infancia y Adolescencia”, explicó el psicólogo a Infobae.
– ¿Hay un protocolo especial en el caso de que mi hijo o estudiante sea el acosador?
“Lo que se quiere lograr sobre todo es crear una lógica restaurativa. Entonces es evitar esas acciones punitivas donde usualmente la gente quiere sangre y cabezas. Eso no sirve y usualmente empeora la situación”, explicó el especialista.
Por ello, indicó que el protocolo o la atención que debería contemplarse con el niño o niña acosador es “por ejemplo, crear proyectos restaurativos en donde las personas que han agredido entiendan que hicieron mal que conecten con las emociones y hagan cosas para reparar eso de manera profunda y real. Esto no es solamente una cosa de pedir disculpas o escribir algo, esto es un proceso largo de formación”.
-¿Qué consecuencias pueden existir si no se tratan a tiempo, y de manera adecuada, los casos de bullying en los colegios?
Aunque el acoso escolar representa muchos factores de riesgo en los niños, de acuerdo con Mejía, “el bullying es uno de los factores más altamente relacionados con el suicidio infantil y con problemas de salud mental”.
– ¿Cuál es su consejo para los niños y niñas víctima de acoso escolar y para aquellos que presencian este tipo de agresiones?
“Que sepan que no están solos, que siempre busquen ayuda, y que sepan que puedan contar con un adulto”, es el principal mensaje del director del programa Aulas en Paz para los pequeños que son víctimas de bullying.
Para el caso de los niños y niñas que han observado situaciones de acoso escolar, el mensaje del psicólogo es: “Que sepan que ellos y ellas tienen un poder de terminar la situación, de hacer algo cuando alguien la está pasando mal. Ahí vamos a comenzar a cambiar la cultura para lograr apoyo y cuidado mucho en lugar de de de desconectarnos y pensar que no es con nosotros el problema o pensar que esto solo se aborda castigando a la gente”.
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