París, 24 jul (EFE).- Las gimnastas españolas se quejaron este miércoles de la incomodidad de las camas de la Villa Olímpica, “horribles” y que les causan molestias de espalda.
“Las camas son durísimas, horribles, pero llegamos tan cansadas…”, dijo Ana Pérez, que disputará en París sus segundos Juegos. “Para mí ha sido un poco raro”, añadió sobre la estructura de las camas, de cartón.
La sevillana comentó que el primer día se le cayó el café sobre una pata de la cama y pensó que podría partirse, “pero sigue entera”, dijo con alivio.
“La cama me tiene molida”, coincidió Alba Petisco. “Tengo la espalda muy tiesa y en el entrenamiento me pasa factura”.
Pérez, Petisco y Laura Casabuena competirán el domingo con el objetivo de meterse en las finales olímpicas. Por ello no participarán en la ceremonia inaugural del viernes.
“Es una decisión que hemos tomado nosotras”, explicó Ana Pérez en una conferencia de prensa organizada por el COE. “No perdemos el foco, hay que tener dos dedos de frente y entender que no es recomendable estar ocho horas de pie teniendo que competir día y medio después”.
Casabuena comentó que salir de “la pequeña burbuja” del Centro de Alto Rendimiento, lejos de inquietarlas las ayuda a despejarse y a desconectar. EFE
nam/jap
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