Largas colas y bocinazos en la caótica jornada de vacunación en Asunción

Asunción, 30 sep (EFE).- Centenares de paraguayos expresaron este jueves con bocinazos sus quejas ante el colapso de la campaña de vacunación este jueves en Asunción, que impidió que muchos recibieran la segunda dosis de varias vacunas tras horas de espera en sus vehículos.
El paseo de la Costanera, frente a la bahía de Asunción, y la Facultad de Derecho, fueron los puntos desbordados por la afluencia de personas que aguardaban desde hasta hace tres meses para completar la pauta con la rusa Sputnik V, que ha ido llegando al país en remesas muy espaciadas en el tiempo.
Al enojo se sumó la desorganización del personal del Ministerio de Salud y de los militares y policías municipales, que no informaron a los conductores de la parte final de las colas de la imposibilidad de llegar a tiempo antes del cierre de las instalaciones, a las 17.00 hora local.
Muchos de los concentrados en la Costanera salieron de sus automóviles para acercarse a la carpa de vacunación y recriminar frente a los medios a los funcionarios de la cartera sanitaria, que todos los días anima a vacunarse como una responsabilidad ciudadana.
Finalmente, el viceministro de Salud, Hernán Martínez, se personó en el lugar para anunciar que se prolongaba la vacunación, añadiendo que se analizará las causas de las fallas y se procederá en consecuencia.
El propio ministro ayudó a descongestionar la situación vacunando a los presentes.
AstraZeneca, Moderna y Pfizer eran, además de la Sputnik V, las vacunas dispuestas hoy para la segunda dosis.
El Ministerio ha vacunado a alrededor de 2,6 millones de personas con una dosis, y a 1,8 millones con ambas, sobre una población total de 7.353.038 habitantes.
El país suramericano acumula algo más de 16.000 muertes desde marzo de 2020, cuando se detectó el primer caso de la covid-19.
Paraguay está en su nivel más bajo de transmisión, en una tendencia descendente comenzada hace más de diez semanas.