La karateca Carmen García enseña a dar una patada a la violencia de género

Zaragoza, 27 jul FE).- La karateca Carmen García Alcay, de 54 años, le ha dado una patada directa a la violencia de género al convertirse en la primera mujer española en lograr el cinturón negro 8 º dan por vía examen y dedicarse a enseñar a las demás mujeres a cómo defenderse de la violencia de género dentro del domicilio.

Ganar confianza, tener herramientas de prevención, aceptar las cualidades de tu cuerpo y adquirir recursos ante una situación de violencia son algunos de los objetivos por los que García Alcay ha centrado su examen en las agresiones sexuales que se producen en el interior de un domicilio y ha reorientado su vida a impartir cursos de autodefensa femenina.

Así lo ha expresado la karateca aragonesa en una entrevista a EFE, en la que ha recordado que hace ya 42 años que empezó a practicar este arte marcial en un centro cercano a su casa.

“Tenía 13 años recién cumplidos y siempre había dicho que quería hacer kárate. Tuve la suerte de que mi madre me apoyara y me repetía que de mayor saldría a la calle, que la seguridad y la confianza eran muy importantes y que debía aprender a defenderme. Así lo hice”, ha afirmado.

Aunque García Alcay mantiene todavía su esencia e ilusión por aprender, ha lamentado que hace 23 años la vida le diera el golpe “más duro” al sobrevivir a un accidente de coche que la tuvo una semana en coma, dos meses en el hospital y un año de baja.

“A pesar de ello, aquí continúo. Cada paso ha sido un trabajo para mí. Hasta que me sentí parecida a cómo me sentía antes, tardé más de cuatro años. Cuando te pasa algo así, te rompes en un segundo y te cuesta toda una vida recuperarte, en el caso de que te recuperes. Conseguir este cinturón es un logro y el resultado de una lucha”, ha valorado.

Lo que nunca cambió era el significado e importancia que había forjado en torno a esta modalidad que le “abrió mundo” y que la llevó a formar parte del conjunto nacional en 1990, momento en el que las mujeres solo podían competir en las pruebas individuales, y a proclamarse campeona del mundo por equipos categoría senior en 1994.

Para la deportista, que ha obtenido otros reconocimientos como ser bronce en el Mundial, “el kárate ha ido cambiando en base al reflejo de la sociedad”, por lo que “ahora no se podría decir que es un deporte con grandes diferencias entre hombres y mujeres a pesar de que, al principio, hubiera pesos desiguales, por ejemplo”.

No obstante, si algo tuvo claro desde su 5º dan es querer utilizar este arte marcial como forma de autodefensa para ayudar y ayudarse: “Aproveché mi experiencia con la Federación Aragonesa de Luchas Olímpicas y Disciplinas Asociadas, donde ya hacía cursillos orientados hacia la violencia de género, y mis propios planteamientos en la vida adulta”.

“Quería enfocar este último examen en la violencia de género dentro del domicilio porque en el exterior es fácil que puedas contar con la ayuda de alguna persona o con obstáculos en la vía que te posibiliten escapar”, ha valorado.

Sin embargo, dentro del domicilio, “es posible que no veas la salida” y, por ello, “es importante presentar diferentes soluciones y enseñar herramientas para escapar o plantar cara cuando, incluso, te va la vida en ello y la intención del agresor es matarte”.

En estos exámenes, como el que ahora le ha llevado a hacer historia en España al ser la primera mujer en superar el 8º dan por vía examen, la persona que se presenta cuenta con un intervalo de tiempo de 8 a 15 minutos para desarrollar diferentes ejercicios con enfoque libre.

“La autodefensa es muy importante”, ha recalcado Carmen García Alcay, es “aprender medidas preventivas, adquirir más confianza y conocer cuáles son las cualidades de nuestro cuerpo”.

“El deporte y la autodefensa sí pueden proporcionar más seguridad”, ha aseverado, por lo que acudir a este tipo de cursos puede ayudar a las mujeres a “ganar confianza con ellas mismas y descubrir sus propias capacidades”.

“Peses 40 kilos o midas 1,20 metros puedes sacar partido a las cualidades de tu cuerpo. Es importante conocer posibles herramientas que puedes utilizar en el caso de vivir una situación de violencia para que puedas rehuir de ella y no perder tu propia confianza”, ha concluido. EFE

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