La inmunidad adquirida nos protegerá contra nuevas variantes del COVID-19, dijo el especialista español Miguel Marcos

"Es altamente improbable que ‘volvamos para atrás’, porque la inmunidad que tenemos ya adquirida frente al virus, de forma individual y colectiva, es más que probable que también proteja, en mayor o menor medida, frente a otras variantes", afirmó Marcos (REUTERS/Washington Alves)
“Es altamente improbable que ‘volvamos para atrás’, porque la inmunidad que tenemos ya adquirida frente al virus, de forma individual y colectiva, es más que probable que también proteja, en mayor o menor medida, frente a otras variantes”, afirmó Marcos (REUTERS/Washington Alves) (WASHINGTON ALVES/)

El avance de la variante Ómicron del SARS-CoV-2, detectada en Sudáfrica el 24 de noviembre pasado, está generando un pico de casos que para lugares como Europa o EEUU significan el apogeo de la sexta ola de la pandemia y para Argentina el ingreso de lleno en la tercera ola. Los científicos coinciden en que sus efectos sobre la salud serían menores que los de su antecesora Delta, pero aún así está poniendo a prueba, una vez más, a los sistemas de salud del mundo, porque aunque las camas de terapia intensiva no estén sobreocupadas, la atención primaria se ha visto afectada.

Tal como indica un estudio realizado recientemente en Sudáfrica, la variante “Ómicron causaría una enfermedad menos grave, reduciendo el riesgo de hospitalización y muerte respecto a Delta en un 25%”, aunque consideró que su gravedad se ha atenuado sobre todo por las vacunas y la infección previa.

Esta menor gravedad de los cuadros que genera Ómicron ha permitido que el aumento exponencial de los casos no se tradujera en una proporción similar en el número de muertos, a pesar de lo cual, es evidente que tracciona esa estadística.

¿Pero en qué etapa de la pandemia nos está ubicando Ómicron? ¿Hacia dónde vamos? ¿Dependemos de la aparición de una nueva variante para saber si esta crisis sanitaria será superada o continuará?

Para arrojar luz al respecto, Infobae mantuvo un diálogo con el médico internista doctor Miguel Marcos Martín, profesor titular del Departamento de Medicina de la Universidad de Salamanca y del Servicio de Medicina Interna del Hospital Universitario de Salamanca, España.

El doctor Marcos había considerado en diciembre pasado, a un mes del descubrimiento de la variante detectada en Sudáfrica: “Estamos probablemente en la transición de la pandemia a la endemia”, entendiendo por el primero de los términos a la actual situación en que existe una “infección descontrolada en todo el mundo”, que cobró fuerza con la aparición de Ómicron, cuando aún Delta seguía avanzando y contagiando en muchos países. “Y endemia es la presencia de un número de casos más o menos estable cada año o en un periodo de tiempo”, puntualizó.

miguel marcos
Miguel Marcos Martín, profesor titular del Departamento de Medicina de la Universidad de Salamanca y del Servicio de Medicina Interna del Hospital Universitario de Salamanca, España

Desde entonces, tanto en Argentina como en su país, España, los casos no pararon de crecer batiendo las marcas incluso de las olas anteriores. El Ministerio de Salud argentino informó el viernes 14 de enero que, en las últimas 24 horas, se habían registrado 96 muertes y 139.853 contagios de coronavirus, lo que implicó un nuevo récord desde que inició la pandemia. El último pico se había registrado el martes 11 de enero, cuando se informaron 134.439 casos.

Para dar un panorama de lo que ha sido el último mes para España, desde el 14 de diciembre hasta el 14 de enero se notificaron 2.726.908 nuevos casos. De estos, 1.512.749 fueron en las últimas dos semanas.

“Estamos en plena onda epidémica en muchos países (como España o Argentina) debido sobre todo a la gran transmisibilidad de la variante Ómicron, por lo que es importante tomar las precauciones necesarias para aminorarla en la medida de lo posible”, recordó Marcos, en diálogo con Infobae.

Aún así, recordó que en otros países ya está descendiendo, también rápidamente, el número de casos. Ese rápido descenso, la relativamente menor repercusión en casos graves y muertes comparando con otras olas, el porcentaje de población vacunada, y la aprobación reciente de fármacos antivirales vía oral, nos hacen pensar que efectivamente estamos en la transición de la pandemia a la endemia”, ratificó. Esto significa que se pasará “a una situación en la que sigan existiendo infecciones por SARS-CoV-2, sigan siendo relevantes sobre todo para pacientes frágiles o inmunodeprimidos, pero el manejo de la infección sea más parecido a como se manejan otras enfermedades”.

El especialista español remarcó que “muchos expertos coinciden en que estamos en esa transición, pero lo que es imposible es precisar el momento en que ocurriría” el salto hacia la situación de endemia, pero destacó que será un proceso “gradual, consistiendo en una sucesión de acontecimientos”.

La multiplicación de casos en todo el mundo que la supercontagiosa Ómicron está generando, podría conducir a la aparición de nuevas variantes. Se sabe que, cuánto más se reproduzca un virus, más posibilidades tiene de cometer “errores” en la transmisión de su información genética que, en muchos casos, le permitirán sobrevivir y en otros no. Algunas variantes tendrán ventajas para replicarse más rápidamente e infectar con mayor eficacia a las células. Estas serán las que se conviertan en lo que la Organización Mundial de la Salud califica como de preocupación. Muchas mutaciones a lo largo de los casi dos años de la pandemia que surgió en China resultaron en virus que simplemente infectan mejor que el original detectado a fines de 2019.

Cuando este medio le preguntó al doctor Marcos qué vislumbra en caso de que aparezca una nueva variante eficaz, el especialista respondió: “La aparición de variantes es un fenómeno aleatorio, aunque podemos reducir el riesgo de que ocurra con las medidas que ya conocemos para frenar la transmisión de la enfermedad. En todo caso,es altamente improbable que ‘volvamos para atrás’, porque la inmunidad que tenemos ya adquirida frente al virus, de forma individual y colectiva, es más que probable que también proteja, en mayor o menor medida, frente a otras variantes. De hecho, dos de los puntos claves en la evolución de la pandemia es la inmunidad que genere la variante Ómicron junto con la aparición de nuevas variantes”.

"Desconocemos el efecto de reinfecciones repetidas y cada infección puede producir complicaciones o riesgo de COVID persistente", dijo el doctor Marcos (REUTERS/Dado Ruvic/Illustration)
“Desconocemos el efecto de reinfecciones repetidas y cada infección puede producir complicaciones o riesgo de COVID persistente”, dijo el doctor Marcos (REUTERS/Dado Ruvic/Illustration) (DADO RUVIC/)

Aún considerando que esta mutación estaría produciendo cuadros de la enfermedad menos graves por afectar sobre todo las vías aéreas superiores, Marcos llamó a evitar reinfecciones por Ómicron. “De forma general, nunca es bueno infectarse de nada”, dijo.

Destacó como “mensaje importante de transmitir en este momento” que se debe “evitar que se abandonen completamente las medidas de transmisión. Desconocemos el efecto de reinfecciones repetidas y cada infección puede producir complicaciones o riesgo de COVID persistente. Por tanto, no podemos afirmar que sea bueno reinfectarse aunque sí es cierto que la reinfección produciría mayor inmunidad frente al virus. Pero no tiene sentido infectarse para tener menor riesgo de infectarse en un futuro”.

En cuanto a la situación actual de los contagios, altamente dinámica, Marcos dijo que en su país “el sistema sanitario está siendo sometido, una vez más, a un excesivo número de casos, tanto leves como graves, que resulta difícil manejar y, a la vez, mantener la atención del resto de patologías. Afortunadamente ya estamos preparados por las olas previas y el sistema sanitario responde pero inevitablemente afecta a la atención de otras enfermedades”. En ese sentido, destacó que esto es muy importante porque “los pacientes crónicos necesitan una serie de controles y atención sanitaria que lógicamente no puede realizarse de forma óptima en este momento”.

Finalmente, fijó su postura respecto del proyecto del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y su ministra de Salud, Carolina Darias, de comenzar a registrar los casos de COVID-19 como los de gripe. El plan implicaría dejar de contabilizar caso por caso. Es decir, que funcione a través de una red de centros de salud y profesionales que informen la evolución de los brotes de coronavirus, lo que técnicamente se llama “vigilancia centinela” en lugar del método actual de “vigilancia universal”. El método sería similar a una encuesta, parecido al que se usa en Europa para rastrear la influenza.

“Coincido con la mayoría de los expertos que opina que lo ideal sería realizar estos cambios una vez pasada la onda Ómicron y que podamos ver con más claridad la situación y también el efecto de dichos cambios. En este momento son cambios forzados por la propia situación y, aunque es posible que funcionen bien, tampoco podemos garantizarlo”, concluyó.

SEGUIR LEYENDO

Cuándo y cómo terminará la pandemia, según el experto de la Universidad de Salamanca, Miguel Marcos

Un estudio sudafricano afirma que Ómicron es un 25% menos grave que Delta

Por qué Ómicron no será la última variante del coronavirus

Sé el primero en comentar en"La inmunidad adquirida nos protegerá contra nuevas variantes del COVID-19, dijo el especialista español Miguel Marcos"

Dejá un comentario

Tu dirección de Correo Electrónico no será compartida


*