La Confitería del Molino busca recuperar su esplendor: 28 fotos de los trabajos de restauración dentro de sus increíbles salones
13 octubre, 2018
Inaugurada en 1916 frente al Congreso de la Nación, la confitería contaba con vitrales, mármoles y detalles únicos en bronce y cristalería (Guille Llamos)El ingreso principal a la cafetería estaba en la esquina de Rivadavia y CallaoEntre los habitués del lugar se encontraban Alfredo Palacios, Carlos Gardel, Roberto Arlt, Niní Marshall y Oliverio Girondo, entre varios otrosAlgunos historiadores aseguran que Juan Domingo Perón tenía su mesa “favorita” sobre la calle CallaoEn los salones del primer piso se realizaban fiestas de casamiento, cumpleaños de quince y otros festejosCerrada desde fines de los ’90, la confitería sufrió el desgaste del paso de los años. Los expertos trabajan para que una parte del café pueda ser visitada por el público durante la próxima edición de La Noche de los Museos en noviembreEn junio de 2018 se constituyó la Comisión Bicameral Administradora Del Edificio Del Molino, presidida por Daniel Filmus, y el inmueble pasó a estar en manos del Congreso.En 1930 la Confitería del Molino vivió uno de los momentos más duros de su historia: durante los días del golpe de Estado que derrocó a Hipólito Yrigoyen, el lugar sufrió un incendioLos expertos en patrimonio aseguran que la confitería estuvo en constante vínculo con el Congreso Nacional y en muchas ocasiones hubo vigilias en el lugar ante el tratamiento de leyes clave para el paísDurante el intenso trabajo de recuperación los restauradores van encontrando diferentes capas de la historia de la confiteríaPese al abandono y a algunas vandalizaciones, en El Molino todavía quedan elementos de su época de esplendorAsí está otro de los salones especiales del primer piso. Allí, entre otras cosas, se guardaba la vajilla presidencial para los festejos especiales que se realizaban para el 25 de mayo y el 9 de julioEn 1996, la cantante Madonna grabó en la confitería el video de la canción “Love don’t live here anymore”Los mármoles de las escaleras y los distintos salones fueron traídos especialmente de Europa por los fundadores del caféLa imponente escalera del café se encuentra también en recuperaciónEn el subsuelo de la confitería se encontraba la cocina, donde se preparaba principalmente la destacada pastelería del caféEntre las décadas del ’10 y del ’40 la cocina funcionaba las 24 horasLas máquinas con las que se preparaba la destacada pastelería del café eran de avanzada para su épocaEl segundo subsuelo del edificio es uno de los lugares que sufrió más el paso del tiempoEn una ocasión Carlos Gardel encargó una torta en honor a su amigo, el jockey Irineo Leguisamo. Así nació uno de los clásicos del lugar, el llamado “postre Leguisamo”, que incluía merengue, hojaldre y crema de almendras.En los pisos superiores, el edificio cuenta con departamentos, que durante algunos años funcionaron como viviendas de los propietariosPionero en su época, el edificio cuenta con un ascensor antiguo que se encuentra en reparaciónUno de los salones del departamento principal que tiene la confitería en los pisos superioresOculto y desconocido para muchos, el edificio tiene un patio internoLos restauradores encuentran durante su trabajo algunos elementos que permiten reconstruir la historia del caféDesde los balcones superiores hay una vista privilegiada de la ciudadLa fachada del edificio también se encuentra en reparaciónEntre otras cosas, se busca recuperar el cartel histórico del café
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