La prensa turca dio por hecho que James Rodríguez viajaría el 7 de septiembre a Estambul para firmar contrato con el Basaksehir, uno de los equipos jóvenes en la lida de ese país, ganador de la temporada 2019/20. Sin embargo, el colombiano no arribó al país que conecta a Europa con Asia y todo indica que continuará en Everton hasta junio de 2022, fecha en que termina su vinculación contractual.
El cierre de mercado de fichajes en el fútbol turco cerrará el 8 de septiembre, por lo que muy difícilmente Rodríguez Rubio alcanzaría a firmar con el Basaksehir, club al que no se siente seguro de llegar, según el Liverpool Echo. Así, pues, regresaría a entrenamientos con los toffees, bajo la dirección técnica de Rafa Benítez, tras un breve descanso por las jornadas FIFA.
“James Rodríguez regresará a los entrenamientos mañana con un movimiento a Turquía fracasado. El colombiano ha sido objeto de interés de Basaksehir, pero con el cierre de la ventana turca el miércoles, parece probable que se quede en Goodison”, publicó el medio en mención.
Lo que explicó el medio británico es que si bien Rafa Benítez autorizó a James para salir del equipo este verano, no hubo oferta alguna del interés del cucuteño de 30 años y, al parecer, del club. De querer irse, tendría que esperar hasta el mercado de fichajes de invierno, si bien primero tendrá que ganarse minutos en el campo de juego para así deslumbrar y atraer oferentes.
“Basaksehir, que tiene su sede en Estambul, ha estado interesado en fichar al colombiano, pero aunque los Blues se dieron cuenta del interés, aún no han recibido una oferta. Y, se entiende, Rodríguez no estaba convencido de la medida”, añadió el Liverpool Echo.
El próximo partido de Everton será el lunes 13 de septiembre ante el Burnley y resta esperar si Rafa Benítez tiene en cuenta a James.
LA POSIBILIDAD DE QUE MEJORE LA RELACIÓN ENTRE JAMES Y BENÍTEZ
Acerca de las posibilidades de que la relación entre Rodríguez y Benítez sea mejor que la que sostuvieron en Real Madrid entre 2015 y 2016, opinó el extécnico del Everton del 2017 al 2018, Sam Allardyce .
“Rodríguez es un jugador instintivo, quiere libertad, no quiere las esposas, pero no un jugador de Rafa, ahí es donde radica el conflicto”, explicó el estratega.
La libertad que al cafetero le gusta en el campo de juego es la que le inquieta a Benítez, que prefiere jugadores que se adhieran estrictamente a las funciones ordenadas por él, así no deslumbren, explicó Allardyce. Ahora, dada su circunstancias, es el goleador del Mundial Brasil 2014 el que tendría que ceder y adaptarse.
“No es el tipo de jugador que Benítez quiere en su equipo”, ratificó quien fue DT de los toffees. Al español le gustan los futbolistas que “saben cómo hacer el trabajo, todos saben cómo jugar con el sistema y saben que tienen que hacer esto y aquello, pasan mucho tiempo en el campo de entrenamiento”.
Un aspecto que juega contra James en este momento es que el Everton está jugando bien y de tres compromisos en la Premier League, ha ganado dos y empatado uno. Es decir, el conjunto que bajo el mando de Carlo Ancelotti a veces fue “James dependiente”, hoy está comprobando que el mediocampista creativo no es indispensable, aunque en su mejor condición le puede sumar.
“Parece que está algo enfurruñado. Rafa sigue ganando y sigue jugando bien y eso lo restará un poco [la situación de Rodríguez] y lo tendrán entonces [enero] a menos que muestre la iniciativa correcta“, agregó.
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