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Una cita de alto voltaje tiene lugar en el mítico estadio de Wembley, donde Italia e Inglaterra se enfrentan por la final de la Eurocopa. Con el arbitraje del neerlandés Björn Kuipers y televisación de TNT Sports y DirecTV.
El duelo se abrió en el inicio en la primera llegada clara. Fue el local el que golpeó primero en una contra perfecta que comenzó con Luke Shaw por izquierda, siguió más adelante con Harry Kane, quien abrió a la derecha para la subida de Kieran Trippier. El lateral del Atlético de Madrid recorrió varios metros y cuando quedó en posición para lanzar el centro aguardó hasta último momento para lanzar el balón aéreo bien pasado rumbo a Shaw, quien definió de sobre pique y puso el 1 a 0 a los dos minutos.
Con la ventaja rápida, el elenco de Gareth Southgate se adueñó de la pelota y complicó al cuadro italiano, que se vio desbordado por los ataques de su rival, que con los extremos bien abiertos y balones largos encontró huecos en espacios que no suele haber. Además, en el aspecto defensivo implementó una presión alta perfecta y a su vez asfixió a Lorenzo Insigne y a Ciro Immobile cuando el balón les llegaba. Pese a esta gran labor, los británicos no tuvieron demasiadas oportunidades frente al arco rival.
Por su parte, la más clara para Italia fue un disparo de media distancia de Federico Chiesa, quien optó por la rebeldía para sacarse un hombre de encima y cuando pudo intentó con un remate que se fue cerca. En los últimos 15 minutos, el cuadro de Roberto Mancini pudo salir del asedio inglés y si bien careció de creatividad para generar peligro, al menos pudo amigarse con la pelota.
Ya en el complemento, la tónica del juego cambió. Inglaterra optó por replegarse y apostó por el contragolpe con Raheem Sterling y Mason Mount. Mientras que Italia se hizo cargo de la tenencia y se vio obligado a salir de su libreto para tomar la iniciativa, ya con Cristante en la cancha que entró por Nicoló Barella, de floja actuación.
Así fue que en los primeros 15 minutos los de Mancini tuvieron dos ocasiones claras, una de Insigne, que remató casi sin ángulo dentro del área y otra con un tiro de Chiesa. En ambas se lució el arquero Jordan Pickford que se llevó los aplausos de los aficionados locales.
Un año después de lo previsto inicialmente por la pandemia del coronavirus, el torneo verá coronarse al nuevo rey de Europa, que cogerá el cetro que tomó hace ya cinco años Portugal. Y lo hará en un cuna del fútbol mundial como Wembley, donde precisamente los Three Lions conquistaron el hasta ahora único título que adorna sus vitrinas. En el Mundial de 1966, en su única final disputada, un hattrick de Geoff Hurst ante Alemania Federal (4-2) en el recinto londinense coronó a Inglaterra como campeona por primera y última vez en su historia. Desde entonces, las semifinales han sido su techo en los grandes torneos; en esa ronda se quedaron los de Gareth Southgate en el pasado Mundial de Rusia 2018 -ante Croacia-, igual que en Italia 1990, y fue también en la misma instancia donde los ingleses fueron eliminados en las Eurocopas de Italia 1968 -por la anfitriona- y de Inglaterra 1996 -por Alemania-.
Ahora, 55 años después de alzar el trofeo Jules Rimet al cielo de Londres, los británicos tienen otra oportunidad de alcanzar la gloria y de nuevo ante su público, que abarrotará las gradas de la cancha ante la ausencia de muchos aficionados de fuera del Reino Unido por las duras restricciones por la pandemia de coronavirus. Con el aliento de unos 60 mil fanáticos, el combinado inglés mantendrá su bloque habitual, que le permitió acabar primera en el Grupo D y eliminar, sucesivamente, a Alemania (2-0), Ucrania (0-4) y a Dinamarca (2-1), en unas semifinales en las que necesitó un gol de Harry Kane en la prórroga.
El delantero del Tottenham, que acumula 4 goles en la competición, liderará un ataque en el que lo acompañarán el ariete del Manchester City Raheem Sterling y el jugador del Chelsea Mason Mount, que ha vuelto al grupo tras su aislamiento por su contacto con el escocés Billy Gilmour, que dio positivo por coronavirus tras el partido entre ambas selecciones.
Por su parte, la cuatro veces campeona mundial Italia (1934, 1938, 1982 y 2006), pasó todavía más apuros para llegar a la final, después de unas semis en las que necesitó la tanda de penales para eliminar a España. Antes había ganado todos sus encuentros del Grupo A, sin recibir ni un solo tanto, y batió en la prórroga a Austria en octavos (2-1) y a Bélgica en cuartos (1-2).
”Llevamos muchos años trabajando para conseguirlo. Todavía no hemos ganado nada, tendremos que ganar el domingo para considerarlo un éxito. Inglaterra tendrá todo un estadio detrás de ella, y dependerá de nosotros ponerlos bajo presión. Tendremos que jugar con concentración pero también con alegría, porque solo se puede ganar una final si se aprovecha para divertirse”, advirtió el seleccionador Roberto Mancini. Tras la decepción de no clasificarse para el Mundial de Rusia, la Azzurra se puso en manos de Mancini y vuelve a lo grande a un gran torneo, donde espera conquistar, contra viento y marea, su segundo título continental.
Solo en 1968, año en el que fueron anfitriones, consiguieron proclamarse campeones europeos, precisamente en una edición en la que eliminaron a los ingleses en semifinales antes de imponerse en la final ante Yugoslavia. Tanto en Bélgica y Países Bajos 2000 -ante Francia- como en Polonia y Ucrania 2012 -ante España- quedaron subcampeones. Este domingo, con el público en contra, buscarán imponer su juego de presión e incrementar su racha de 33 partidos sin conocer la derrota con la única ausencia del lesionado de gravedad Leonardo Spinazzola. Gianluigi Donnarumma volverá a formar bajo palos por detrás de Giovanni Di Lorenzo, Leonardo Bonucci, Giorgio Chiellini y Emerson Palmieri. Nicolo Barella, Jorginho y Marco Verratti continuarán llevando la manija en centro del campo, mientras que Federico Chiesa, Ciro Immobile y Lorenzo Insigne formarán el trío de ataque transalpino que buscará silenciar Wembley.
TABLA DE TÍTULOS DE EUROCOPA
Alemania 3
España 3
Francia 2
Italia 1
Portugal 1
Países Bajos 1
Dinamarca 1
Grecia 1
Rusia (Unión Soviética) 1
República Checa (Checoslovaquia) 1
Estadio: Wembley
Árbitro: Björn Kuipers (NED)
Televisará: TNT Sports y DirecTV
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