El sábado fue el día después. Después de la angustia, después de las controversias, después de la agonía, después de la clasificación a semifinales del Mundial de Qatar 2022. El viernes la selección argentina había superado un bravo escollo en cuartos de final: el empate de Países Bajos en el epílogo, los casi goles en la prórroga, la definición por penales, las discusiones del final. A semejante caldo de tensión había que apaciguar con un día de descanso.
Los que habían sido titulares realizaron trabajos regenerativos y el resto de los futbolistas argentinos alternaron ejercicios con pelota. Al finalizar el entrenamiento, como suele suceder en el día posterior a los partidos, el cuerpo técnico habilitó el ingreso de los familiares del plantel para disfrutar de una jornada distendida junto a los seres queridos.
Las familias de Messi, del Papu Gómez, los padres de Nahuel Molina, la novia de Alexis Mac Allister, la hija del Dibu Martínez, la pareja de Germán Pezzella, la hermana de Leandro Paredes, la esposa del Cuti Romero junto a sus hijas, las compañías de Ángel Correa, Thiago Almada y Rodrigo De Paul según el retrato de una foto en la zona de la piscina externa del complejo junto a 22 personas. Todos compartieron las imágenes en sus redes sociales, en un colorido álbum de la visita de las familias a los jugadores de Argentina tras el pase a la semifinal del Mundial.
Dos días después de la clasificación, se conoció la difusión de un video íntimo en la concentración argentina en la Universidad de Qatar. En el documento audiovisual se ve cómo Thiago Messi, el hijo más grande de Lionel con diez años, juega al ping pong con Ian Scaloni, el hijo más grande de Lionel también con diez años. Los dos hijos de dos pilares de la ilusión argentina en Qatar comparten un rato de esparcimiento en medio de un Mundial saturado de tensiones.
Recientemente, Ian Scaloni también se hizo famoso luego de que las cámaras lo encontraran bajando de la tribuna al campo de juego por pedido del entrenador argentino. Un personal de seguridad le impidió el acceso a la cancha y los invitó a sentarse en el banco de suplentes. Allí, el niño enfundado en una bandera argentina, lloró desconsolado de la emoción, lo que motivó también las lágrimas de su padre.
Ian nació en Roma y Noah, su hijo más chico de cuatro años, en Mallorca, donde hace catorce años conoció a Elisa Montero, su esposa de origen español. Ian nació en 2012 mientras Scaloni jugaba en la Lazio y Noah, en 2016, cuando el futbolista rosarino ya se había retirado en el Atalanta italiano. El 19 de mayo de 2018, Lionel y Elisa, que era jugadora de voley, se casaron en absoluto hermetismo.
En una nota, el técnico de la selección argentina reveló que a sus hijos, a pesar de no haber nacido en el país, a pesar de su tono español, “son más argentinos que yo”. Y contó que les gusta ver los partidos, que les encanta la pasión con la que lo viven los hinchas argentinos y que se contagiaron de ese fervor.
Un día después de la jornada de distensión, el plantel argentino volvió a entrenarse de cara al partido contra Croacia por las semifinales de Qatar 2022, en un duelo se jugará este martes a las 16 (hora argentina) y a las 22 en Doha. Los jugadores realizaron diferentes ejercicios físicos y con pelota para luego darle paso al trabajo táctico que lideró el DT celeste y blanco. No estarán disponibles Marcos Acuña y Gonzalo Montiel por haber llegado a las dos tarjetas amarillas. Resta saber cómo están de sus molestias físicas Ángel Di María y Rodrigo De Paul y qué disposición táctica pondrá en cancha: si repetirá el 5-3-2 del último partido o retornará al 4-3-3 con el que inició la Copa del Mundo.
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