Este miércoles 10 de agosto, el centro porteño será caótico. A partir de las 11 de la mañana tres columnas de la Unidad Piquetera ingresarán a la Ciudad de Buenos Aires con la decisión, votada en asamblea, de instalarse en Plaza de Mayo, por 24 horas, 48 o 72 horas para que los reciba el ministro de Economía, Sergio Masa. En el interín, las organizaciones sociales de izquierda enfrentadas al gobierno de Alberto Fernández, protestarán frente al ministerio de Desarrollo Social y el Palacio de Hacienda y “en el marco de la permanencia” realizarán actividades culturales y callejeras frente al Cabildo, la Catedral.
“Nos vamos a quedar en la Plaza de Mayo para que nos reciba el ministro de Economía, Sergio Massa”, adelantó Eduardo Belliboni, el líder del Polo Obrero a este medio.
Las marchas hacia la Casa Rosada y el ministerio de Economía, separados por unos cincuenta metros, partirán de tres puntos: el Obelisco, la Avenida Belgrano y la intersección de l9 de Julio y Avenida de Mayo.
A partir de las 15, un nutrido grupo de manifestantes, reclamarán en el ministerio de Juan Zabaleta, Ubicado en 9 de Julio al 1900, por la universalización de los programas sociales, como el denominado Potenciar Trabajo, a su vez más comida para los comedores y merenderos populares y exigirán “que se cumpla con la entrega de las herramientas y maquinarias prometidas para más de tres mil emprendimientos”.
“Esta semana se anuncia una inflación escandalosa que en alimentos superara los dos dígitos. Eso bajara a la línea de pobreza a más del cincuenta por ciento de la población trabajadora”, recuerda el dirigente del Polo Obrero (PO).
Para las 16, la mayoría de los piqueteros de municipios bonaerenses como La Matanza, Lomas de Zamora, Moreno, Merlo, Berazategui, Esteban Echeverría, Lanús, Presidente Perón, Almirante Brown y CABA, entre otros estarán concentrados en la histórica plaza.
Para entonces, esperan haber sido recibidos por el flamante ministro de Economía. El encuentro, al menos hasta el cierre de esta nota, no estaba en agenda, según pudo saber Infobae.
La audiencia fue solicitada la semana pasada. No hubo respuesta y los dirigentes se niegan ser escuchados por “funcionarios de tercer nivel”.
En el petitorio, la Unidad Piquetera solicita una actualización en los montos de los programas como el Potenciar Trabajo y la Tarjeta Alimentar; incremento del Salario Mínimo Vital y Móvil y un bono de emergencia de 20.000 pesos.
A través de un comunicado, los piqueteros denunciaron: “El ajuste está llegando a la comida que no viene a los comedores populares, a los compañeros que están desocupados y ni siquiera tienen un programa social que los ayude a poner un plato de comida en la mesa”, por esta y otras razones, los movimientos de izquierda fundamentaron la medida de fuerza de hoy, que puede extenderse por varios días bajo la consigna: “No aceptamos que la crisis la paguemos los trabajadores”.
-¿Permanecer en Plaza de Mayo para que los atienda Massa es equivalente a acampar?, le preguntó Infobae al líder piquetero.
-No. Los compañeros se irán rotando las 24 horas. Vamos a estar frente a la Casa Rosada, a metros del edificio de Economía hasta que el nuevo ministro nos reciba. Como a Silvina Batakis, a Massa le presentamos un pedido de audiencia apenas asumió. Como no nos contestó, permaneceremos en la plaza del pueblo, respondió.
Durante la mañana de hoy, el Gobierno de la Ciudad evaluará las medidas que tomará por la segura interrupción del Metrobús, el corte de arterias, desvío de al menos 40 líneas de colectivo; congestión de tránsito y comercios que suelen bajar sus persianas.
Si bien las demandas de las organizaciones de izquierda son contra el Gobierno Nacional, las protestas y los inconvenientes transitan en pleno centro de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
La Unidad Piquetera tiene prevista una serie de actividades que pretenden concitar la atención y concurrencia de grupos de jóvenes, estudiantes y de sindicatos afines. Anunciaron las presencia de “artistas solidarios” como el grupo de rock Las Manos de Filippi, tenores del Teatro Colón y un grupo de “raperos sorpresa”.
A las 15.30, frente al Cabildo, está prevista una “clase de guitarra abierta, trompeta y trombón” de una hora de duración; a las 16, frente a la Catedral, una “charla abierta con jubilados” y a las 17 los jóvenes participarán de una asamblea para debatir la realidad social del país.
A las 17.30, en Plaza de Mayo está previsto el saludo a los dirigentes docentes en el marco del paro nacional; a las 18 se desarrollará el acto de la Unidad Piquetera. La jornada cerrará a las 20 un festival artístico.
Para esa hora, ya se habrá decidido si se instalan las carpas para pasar la noche allí, o si la permanencia continuará el jueves con posibilidad de extenderse a la mañana del viernes; una medida, que como las anteriores, será tomada en el lugar según la dinámica de los acontecimientos que van, desde un posible accionar policial para evitar el despliegue de carpas y ollas populares, o la requisa de vehículos para evitar la llegada de suministros a los manifestantes que pernocten en Plaza de Mayo; o un eventual encuentro en el Palacio de Hacienda con el ex presidente de la Cámara Baja. O ninguno de esos dos hechos, y entonces deberán evaluar la razonabilidad de seguir acumulando horas a la intemperie, con el desgaste que eso significa.
Todas las posibilidades están abiertas
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