Cuida bien tus cuchillos de cocina, tus comensales seguro lo agradecerán

Es difícil hacer una buena comida sin un buen cuchillo, pero si no lo cuidas, la calidad y el precio no serán importantes.

“Eventualmente tendrás que afilar el cuchillo“, dice Dave Arnold, un ex instructor de la escuela culinaria L’Academie de Cuisine, que suele afilar los cuchillos de precisión de su casa. “No importa qué tipo de cuchillo es“.

Esto es lo que necesitas saber sobre el afilado para que tus cuchillos duren muchos años.

Comprende cómo funciona un cuchillo. La mayoría de ellos están afilados en un ángulo de 30 a 40 grados, dice Arnold, y con el tiempo y el uso, “ese borde muy delgado sufrirá algún daño”. El borde comenzará a aplanarse a una forma más redonda en lugar de un ángulo agudo y puntiagudo. El borde también puede doblarse y es algo que no puedes ver a simple vista. Cuando afilas un cuchillo, estás moliendo la parte del metal para reintroducir el ángulo agudo adecuado.

Has de saber cuándo se debe afilar tu cuchillo. El objetivo de tu cuchillo afilado es ayudarte a trabajar de manera eficiente, cortando fácilmente los alimentos sin tener que ejercer demasiada presión. Los cuchillos desafilados también pueden causar accidentes cuando se resbalan en lugar de cortar los alimentos. Arnold sugiere que los tomates, los limones, los pimientos y las zanahorias sean alimentos efectivos para probar si es necesario reafilar el cuchillo. También las cebollas. No funcionará para todos ya que la sensibilidad a la sustancia química de la productora de lágrimas varía, pero Arnold dice que un cuchillo sin filo es probable que abra más capas de cebolla y libere más jugo que un cuchillo afilado que crea un corte limpio.

La prueba de buen aspecto que implica ver cuán bien corta un cuchillo en un papel puede resultar un poco dudoso. Incluso un cuchillo afilado, pero no perfectamente, podría tener dificultades para cortar el papel. Arnold señala que el grosor de algunos productos de papel (papel para impresoras, blocs de notas, etc.) puede varias y ofrecer resultados no concluyentes. Si él fuera a hacer la prueba en papel, lo haría con papel de periódico.

Si crees que los cuchillos afilados profesionalmente es algo demasiado caro para justificarlo, puedes descansar tranquilo. La mayoría de los profesionales cobran menos de USD 10 por afilar un cuchillo de chef estándar.

Piensa en afilar tus cuchillos. Incluso si sabes afilar tus cuchillos, puede que no estés tan familiarizado con el concepto exacto de “afilar”. Honing no afila la cuchilla. En cambio, dice Arnold, realinea la cuchilla, corrigiendo la flexión o el plegado descritos anteriormente. La afiladura se puede hacer con un acero que se parece a una daga. A menudo, los encontrarás incluidos en juegos de cuchillos, pero Arnold prefiere la calidad de los aceros que compra bajo demanda. Él recomiendo una cubierta de diamante de Messermeister, que cuesta alrededor de USD 30. Otros tipos están disponibles en el rango de USD 15.

Para afilar tu hoja, desliza ligeramente el borde del cuchillo en un ángulo de 15 o 20 grados a lo largo del acero. Tres veces en cada lado de la cuchillo debería ser suficiente, dice Arnold. Idealmente, harías esto antes (o después) de usar tu cuchillo, pero no somos idealistas aquí. Seamos prácticos: incluso hacerlo de vez en cuando te ayudará. Si perfeccionarlo no es algo que te interese, no necesariamente arruinará tu cuchillo. Solo tendrás que afilarlo más a menudo.

Usa la tabla perfecta. Las superficies duras pueden dañar o astillar un cuchillo. Las tablas de madera o de plástico son buenas opciones. Y como mencionamos antes, cuando se trata de tablas de cortar, cuanto más grande mejor.

Limpiarlos adecuadamente. Utilizar jabón de mano es la mejor manera de limpiar tus cuchillos. Los lavaplatos pueden ser especialmente difíciles en las empuñaduras de los cuchillos, causando que se decoloren, se rompan o se separen de la cuchilla. Los bastidores o la canasta de utensilios pueden dañar las cuchillas y viceversa, y sacar un cuchillo del lavavajillas no es una receta segura. Después de lavar un cuchillo (una esponja con agua tibia y jabón), sécalo bien y cuidadosamente con una toalla. No lo guardes sucio o mojado a menos que quieras oxidarlo.

Almacenarlos de manera correcta. Protege la cuchilla, protégete. Nunca debes dejar una cuchilla expuesta de manera que pueda causar lesiones. Prefiero las fundas de plástico en los cuchillos para poder guardarlos en un cajón. Los bloques de madera también son aceptables, al igual que las tiras magnéticas en la pared, siempre que no estén al alcance de los niños curiosos o en un lugar donde las personas sean propensas a toparse con ellos.

FUENTE: INFOBAE NOTICIAS