Con una plata ganada este sábado por el equipo español de piragüismo en el K4-500, Saúl Craviotto sumó su quinta presea olímpica, igualando a David Cal como el deportista español más laureado en los Juegos, al tiempo que se confirman los deportes acuáticos como los grandes caladeros de medallas para España.
En un final de infarto, Alemania se llevó la medalla de oro superando en los últimos metros al combinado español, formado por Craviotto, Carlos Arévalo, Rodrigo Germade y Marcus Walz. Eslovaquia se llevó el bronce.
Para Craviotto, el policía de 36 años que fue abanderado español en la ceremonia de apertura de Tokio-2020 junto a Mireia Belmonte, supone su quinta medalla olímpica en cuatro participaciones: dos oros, dos platas y un bronce.
El piragüista catalán iguala así a su ídolo David Cal, quien también ganó cinco medallas (un oro y cuatro platas entre Atenas-2004 y Londres-2012), como los deportistas españoles más laureados de la historia.
“Pensábamos que íbamos a sacar el oro, la cosa pintaba bien pero muy bien. Hemos hecho nuestra carrera, nos hemos dejado la piel y estoy súper orgulloso de los tres compañeros que he tenido empujando detrás”, dijo Craviotto a medio camino hacia el podio.
“Pero a mí esta medalla me sabe a gloria, estoy encantado”, recalcó. “Cuatro Juegos Olímpicos, los cuatro con medalla con casi 40 años. ¿Qué voy a pedir yo? Estoy más contento que nadie”, insistió Craviotto, que comenzó a dar paladas con su padre cuando tenía 7 años y que se hizo popular en su país tras ganar un conocido programa de cocina en televisión.
La medalla del K4-500 reafirma que España cuenta con un gran caladero de medallas en los deportes de agua: de las 14 medallas confirmadas hasta ahora en Tokio-2020, tres han sido en piragüismo y otras dos en vela, siendo estos dos deportes los que más preseas han aportado al deporte español, que de los 165 podios logrados hasta ahora en los Juegos Olímpicos de verano, 21 fueron para la vela y 17 para el piragüismo.
– ‘Plata que sabe a oro’ –
El jueves, Craviotto acabó en el séptimo puesto de la prueba K1 200 y advirtió que su verdadero objetivo era la carrera del sábado, donde tenía sus mayores esperanzas de medalla.
En las semifinales de este sábado, el equipo español ya había advertido de su potencial al clasificar en primer lugar con un tiempo de 1:24.355, por delante de Australia (+0.513) y Hungría (+0.563).
“Ha sido un honor estar con él, entrenar juntos y estar en el mismo bote. Son cinco medallas en Juegos Olímpicos, es espectacular”, destacó su compañero Marcus Walz, que fue oro en Rio-2016 en la categoría de K1 1.000 metros.
“Estamos muy contentos con el resultado. Han sido unos años duros, especialmente este último”, añadió sobre las consecuencias de la pandemia y el aplazamiento de los Juegos. “Para nosotros es una plata que sabe a oro”, subrayó.
“Fue una carrera fuerte, muy cerrada con el equipo alemán. Ellos lo merecieron. Nosotros somos un equipo muy unido y estoy muy contento de haber logrado esto juntos”, cerró el deportista nacido en Oxford, de madre alemana y padre británico, criado en Mallorca.
Rodrigo Germade sí se estrenó en el podio, tras haber finalizado en la quinta posición en el K4 1.000 de Rio. En zona mixta recordó el último año y medio.
“Nos tuvimos que adaptar mucho durante la pandemia en España, que al principio fue muy dura. Intentamos hacer entrenamientos en casa como podíamos. Perdimos mucha forma”, rememoró sobre el primer semestre de 2020.
“Luego intentamos recuperar lo más pronto posible. Poco a poco fuimos recuperando la forma. Conseguimos hacer un grupo burbuja y estar lo más aislados posible”, añadió.
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