Yesika Lázaro es originaria de Pamplona, Norte de Santander, pero el 2 de abril la mujer migró a Perú en busca de oportunidades laborales, en compañía de uno de sus hermanos y con destino a la casa de su padrastro. Sin embargo, desde el 20 de mayo su familia no tiene noticias sobre su paradero, por este motivo solicitan la ayuda del Ministerio de Relaciones Exteriores.
El 6 de abril se radicaron en el barrio Comas. Días después, Yesika consiguió trabajo en una cebichería ubicada cerca a la estación El Naranjal. La mujer tenía por costumbre comunicarse todos los días con su mamá, Sandra Parra, por medio de videollamadas.
La última llamada la hizo el 20 de mayo, cuando le contó a su mamá que renunciaría al sitio, ya que había encontrado un nuevo trabajo más cerca de su hogar. Uno de sus hermanos afirmó que el 21 de mayo la mujer renunció y al día siguiente volvió por su pago, según declaraciones retomadas de El Tiempo.
El 22 de mayo Yesika llegó a la cebichería acompañada de un hombre peruano, que fue descrito como alto y flaco, y ya había ido en otras ocasiones al comercio. Yesika Lázaro tiene 24 y una hija, que por el momento está al cuidado de su hermano.
Andrés Lázaro, uno de sus hermanos, alienta la búsqueda por medio de las redes sociales. En su cuenta de Twitter, informó que la última vez que fue vista en Comas el Reniec, cuando fue a reclamar su sueldo con un hombre, pero nunca volvió a su casa.
“Tenía ilusiones de mejorar su calidad de vida, de apoyar a su hija y de seguir esforzándose por un futuro mejor”, indicó la madre para Caracol Radio
Los familiares de la mujer aseguraron para Noticias Caracol que ya han realizado recorridos en diferentes zonas, hospitales y morgues y de Lima. Aun así, no cuentan con ningún rastro de la joven. También se han contactado con organizaciones sociales de ese país, con el fin de solicitar ayuda en su búsqueda.
La mujer tiene cabello negro y corto, su piel es bronceada, mide 1.80 m, tiene un tatuaje en el pecho y otro en la cara, ojos cafés y hoyuelos prominentes. Cualquier persona que pueda obtener información de ella se puede contactar con el número +57310899084.
Las desapariciones de mujeres en el Perú son un fenómeno social alarmante, debido a su alta incidencia. Según la Defensoría del Pueblo de ese país, durante el 2020 se reportaron 3.568 desapariciones, mientras que en el 2021 la cifra fue de 3.967.
Las mujeres en el campo se ven expuestas a precarización laboral y violencias basadas en género
El 7 de junio se presentó el informe anual sobre la situación de la mujer en los espacios rurales. El documento reveló que esta parte de la población aún carece de acceso a los recursos destinados por el Estado, una situación crítica teniendo en cuenta los reclamos de este sector social.
El documento fue elaborado por la Contraloría General de la República, la Procuraduría General de la Nación y la Defensoría del Pueblo. Es el tercero de su clase realizado por los organismos constitucionales donde se fijan los avances en favor de las mujeres rurales.
Durante su intervención, el contralor General, Carlos Hernán Rodríguez, advirtió sobre la baja participación de las mujeres en mercado laboral, lo que repercute en mayores niveles de pobreza. La situación resulta particularmente crítica para quienes fungen como cabeza de familia.
“Las limitaciones de las mujeres rurales en el acceso a la educación, dificultan la posibilidad de tener mejores oportunidades en el mercado laboral y ocasiona además que tengan condiciones laborales deficientes, en temas salariales, de informalidad y de discriminación en las contrataciones” afirmó Hernán Rodríguez
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