Boris Johnson promete defender la soberanía de Ucrania en su visita a Kiev

Por Andrew MacAskill

LONDRES, 1 feb (Reuters) – El primer ministro británico, Boris Johnson, se comprometerá a defender la soberanía de Ucrania en una visita a Kiev el martes, como parte de los esfuerzos diplomáticos de Occidente para detener una posible invasión rusa que Moscú dice que no hay pruebas de que esté planeando.

Por su parte, Estados Unidos dijo que está en conversaciones activas con sus aliados sobre el posible despliegue de tropas estadounidenses en el flanco oriental de la OTAN, aparte de unos 8.500 soldados ya puestos en alerta la semana pasada.

Rusia, que arrebató Crimea a Ucrania en 2014 y respalda a los separatistas en el este del país, exige garantías de seguridad, incluida la promesa de que la OTAN nunca admitirá a Kiev.

Estados Unidos ha dicho que hay pocas posibilidades de que Ucrania se incorpore pronto, pero que el país debe decidir su propio futuro, ya que Washington y Moscú están enfrentados por los acuerdos de seguridad posteriores a la Guerra Fría en Europa y las preocupaciones sobre el suministro de energía.

Las tensiones se manifestaron el lunes en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en relación con el despliegue de tropas cerca de Ucrania, ya que tanto Rusia como Estados Unidos utilizaron el foro internacional para calificarse mutuamente de “provocadores”.

Johnson, que se enfrenta a peticiones de dimisión por las reuniones celebradas en sus oficinas a pesar de las normas de confinamiento, tiene previsto reunirse con el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskiy, como parte de su interés por impulsar el papel global de Reino Unido en el mundo, que tanto ha pregonado desde el Brexit.

“Instamos a Rusia a dar un paso atrás y a entablar un diálogo para encontrar una solución diplomática y evitar un mayor derramamiento de sangre”, dijo en declaraciones publicadas antes de su llegada.

“Como amigo y socio democrático, el Reino Unido seguirá defendiendo la soberanía de Ucrania frente a los que pretenden destruirla”.

Johnson tiene previsto discutir con Zelenskiy el apoyo estratégico que Reino Unido puede ofrecer a Ucrania.

Londres ha suministrado armas defensivas y personal de entrenamiento a Ucrania, aunque los ministros han dicho que el despliegue de tropas de combate es poco probable.

El lunes, Estados Unidos y Reino Unido dijeron que estaban preparados para castigar a las élites rusas cercanas al presidente ruso Vladimir Putin con la congelación de activos y la prohibición de viajar si Rusia entra en Ucrania.

Polonia ha dicho que había ofrecido munición a la vecina Ucrania y que estaba esperando una respuesta.

Estados Unidos ordenó a los familiares de sus empleados gubernamentales en Bielorrusia que abandonaran el país, al tiempo que advertía de la conveniencia de viajar a la nación en el contexto de las tensiones con Moscú.

Se esperan nuevas gestiones diplomáticas el martes.

Para la tarde del martes podría tener lugar una llamada entre Johnson y Putin, según Downing Street.

El presidente francés, Emmanuel Macron, y Putin acordaron durante un intercambio el lunes mantener un diálogo sobre la aplicación de los acuerdos de Minsk en relación con Donbass, una región del este de Ucrania donde Moscú ha respaldado a los combatientes separatistas.

El ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, tiene previsto hablar por teléfono con el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken.

El Departamento de Estado dijo el lunes que había recibido un nuevo mensaje  de Rusia después de que Washington presentara la semana pasada respuestas a las demandas de Moscú sobre los acuerdos de seguridad en el continente.

El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, había dicho previamente que las declaraciones de Estados Unidos y de la OTAN en las que se calificaban de inaceptables las principales demandas de Rusia no dejaban mucho margen para el optimismo.

Estados Unidos dijo que no comentaría públicamente la respuesta por el momento.

“Sería improductivo negociar en público, por lo que dejaremos que Rusia decida si quiere debatir su respuesta”, dijo un portavoz del Departamento de Estado.

(Escrito por Costas Pitas; editado por Michael Perry; traducido por Tomás Cobos)