El empresario Omar Benvenuto lleva 28 días desaparecido y en las últimas horas se confirmó que el caso dio un preocupante giro. Desde la familia del hombre de 66 años aseguran que ya no se trata de una simple causa por “averiguación de paradero” sino que se está llevando adelante un secuestro extorsivo por parte de una banda “que no es improvisada, sino que cuenta con una organización importante”.
Benvenuto es oriundo de la localidad bonaerense de Pilar, sin embargo su actividad se centraba en Entre Ríos ya que en Gualeguay gestiona una fábrica de tanques de GNC. Además, posee propiedades en otros puntos de la provincia y allí vive su madre. La ultima vez que se lo vio fue hace 28 días, el viernes 27 de octubre. Ese día su camioneta apareció abandonada, sin signos de violencia y con su Nextel dentro, en el kilómentro 242 de la ruta 12. Un perro rastreador detectó que el empresario cruzó a pie hacia el otro lado de la ruta y es allí donde se pierde el rastro y comienza el misterio. Ese indicio sugiere que hubo un encuentro con otro vehículo en ese punto, pero al momento es solo una conjetura. Lo cierto es que desde ese instante no atendió más su celular.
Los secuestradores llaman a un celular de la familia de Benvenuto, que es parte de la flota de su empresa
Hubo intensos rastrillajes por tierra y aire, pero luego de casi un mes, no aparecieron pistas. Los entrecruzamientos de llamadas para investigar al entorno de Benvenuto generaron, en un principio, un revuelo en la política local. Fueron allanados los domicilios del ex intendente de Gualeguay, Luis Erro, y de un ex senador radical, Hugo Lesca. Pero finalmente, esas líneas de investigación tampoco lograron resultados.
A 28 días de su desaparición, el círculo más íntimo del empresario decidió ponerle fin a un llamativo silencio de radio, que ahora tendría su explicación. El abogado de la familia de Benvenuto, Esteban Español, fue contundente en diálogo con Infobae: “Estamos frente a un secuestro extorsivo”.
El letrado confirmó que “desde el 1 de noviembre se empezaron a recibir llamadas y mensajes de texto reclamando una suma importante de dinero a cambio de la liberación de Omar”. La última comunicación de este tipo fue el pasado lunes. Español destacó que hay elementos en común entre las llamadas: el extorsionador del otro lado del teléfono tiene “la voz de un extranejero” y siempre llama a “un celular de la familia de Benvenuto que es parte de la flota de su empresa”. Además, los contactos no son constantes sino que hay un lapso de tiempo entre uno y otro.
De todos modos, el último llamado que recibió la familia fue un tanto desconcertante: “El modo y las exigencias fueron distintas a las anteriores”, agregó el abogado.
Pero lo que realmente aterra a la familia del empresario es que en ninguna de esas llamadas se recibió una prueba de vida, que es lo que la madre y los hijos de Benvenuto le pedían a los presuntos secuestradores a cambio de guardar silencio. Ahora, ese pacto se rompió ya que la familia decidió no esperar más esa prueba de vida que, hasta ahora, nunca llegó. Por eso, el abogado que los representa accedió al diálogo con este medio.
No se trata de una banda de secuestradores improvisados
Español reveló que “los investigadores están convencidos que no se trata de un secuestro exprés típico de estos tiempos, con cobros de poco dinero e inmediatos, sino que estamos frente a una modalidad que incluye largos tiempos de cautiverio, tratativas que se interrumpen y se retoman y que por lo tanto demanda una organización importante”. En ese sentido, el abogado de la familia afirmó que “no se trata de una banda de improvisados”. Paradójicamente, este dato podría ser alentador: “Esperamos que no sean improvisados, porque eso nos garantizaría la posibilidad de recuperar con vida a Benvenuto”, subrayó.
Efectivamente, mantener cautiva a una persona adulta durante casi un mes demanda una organización y recursos económicos con los que los delincuentes deben contar previamente para poder dilatar la extorsión durante un lapso importante.
Mientras tanto, la investigación sigue incluyendo al entorno de Benvenuto. Allí entra la pista de una presunta mujer en Paraguay con la cual el empresario mantenía una relación, aunque ese vínculo se habría roto recientemente.
Paralelamente, a pesar de que la hipótesis del secuestro extorsivo es la que gana terreno por estas horas, desde el Ministerio de Seguridad prefieren mantener abiertas todas las alternativas, incluida la causa por “averiguación de paradero”. Según pudo saber Infobae, los investigadores todavía no descartan esa posibilidad debido a que los presuntos secuestradores no entregaron una prueba de vida. En consecuencia, estiman que los llamados extorsivos podrían provenir de oportunistas que buscan sacar provecho de la desaparición del empresario para pedir dinero.
No obstante, este jueves ya se resolvió que el caso pase a la Justicia Federal. La Cámara Federal de Apelaciones de Paraná se expidió en ese sentido basándose en los “indicios de secuestro extorsivo”. El juez federal Leandro Ríos será ahora el encargado de supervisar la marcha de la investigación que, por el momento, no arrojó rastros del empresario Omar Benvenuto.
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FUENTE: INFOBAE NOTICIAS
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