La presidenta Dina Boluarte ha acumulado al menos unas cuatro investigaciones en su contra hasta la fecha, que van con delitos desde el homicidio calificado, la acumulación de fondos ilegales para el partido Perú Libre; hasta el abuso de autoridad, el encubrimiento a su hermano Nicanor Boluarte, el cohecho y el enriquecimiento ilícito en el caso Rolex. Para estos tres últimos, la mandataria se ha hecho de un nuevo defensor legal que, en conversación con Infobae Perú en exclusiva, alega ser un vocero más de la mandataria.
Bajo la denominación de “vocero legal”, Juan Carlos Portugal, amenaza con cortar toda posibilidad de que se continúen las diligencias de declaración por parte de la jefa de Estado a fin de resolver el problema de las filtraciones; y, a su vez, se convierte en una capa más por sortear si se intenta acceder a alguna declaración de la presidenta desde la prensa. En tanto, defiende fehacientemente al excongresista acusado de violación sexual Freddy Díaz, e insiste en la inocencia del agresor Adriano Pozo; cuya culpabilidad por el delito de feminicidio no fue acreditada por el Poder Judicial.
— ¿No le preocupa quedar en la misma situación que Mateo Castañeda, en donde puede, de repente, ser detenido con imputaciones que tienen que ver con intentos de manipular a funcionarios?
Me preocuparía si esta manipulación, contenida en un requerimiento hubiese tenido eco a nivel de la autoridad judicial. Con todo respeto, con el juez Concepción Carhuancho, cualquier procedimiento o decisión finalmente no tiene filtro.
Me preocuparía si hubiese tenido una decisión de la Sala Penal de Apelaciones en ese mismo sentido. Esta ha dicho que don Mateo y los otros no constituyen peligro de fuga, ni probatorio. También ha indicado que don Mateo y los detenidos injustamente han sido presos durante 10 días por una transcripción, siendo muy generosos, con un copia y pega.
Y me preocuparía, además, si eso que se dice la sala hubiese dicho que es importante y la sala ha calificado de incipiente, de datos iniciales, que no tienen madurez probatoria para justificar un caso de organización, de manipulación.
Estoy absolutamente tranquilo. El doctor Mateo tendrá que explicar lo que tenga que explicar, yo estoy convencido de que él ha actuado con probidad, no veo ningún problema en hacer defensa de una funcionaria.
— En el caso se han detallado requerimientos que la presidenta habría hecho, a Castañeda, los cuales fueron referenciados por otros investigados. ¿Aceptaría este tipo de requerimientos de ser así?
Que vayan a existir requerimientos implica que hubo requerimientos anteriormente, y eso no es cierto. Como no existieron y conozco perfectamente a la presidenta, con quien me he reunido varias veces, puedo asegurarlo
— ¿Le ha dejado claro que no acataría cualquier solicitud que pueda rayar en lo irregular?
No lo acataría porque ella no lo haría. Es una persona correcta. Ella no ha sido, no sucede al gobierno para delinquir, sino para gobernar.
— ¿Usted conoce a la presidenta a ese nivel íntimo de decir que ella jamás le pediría algo así?
Es una pregunta hipotética, y te aseguro, en ese grado de pregunta especulativa, que eso no va a ocurrir.
— ¿Cuál es su percepción respecto a las investigaciones que van en contra del hermano de la presidenta, Nicanor Boluarte? ¿Se ha comunicado en algún momento usted con el señor Nicanor Boluarte?
No, lo conozco por la televisión.
— ¿No es abogado de Nicanor Boluarte, le han ofrecido esa posibilidad en algún momento?
No soy abogado de Nicanor Boluarte. La presidenta desea que por exclusividad esté con ella. No podría, además, hacerlo; porque la defensa de la presidenta ocupa un gran porcentaje de atención en el estudio y de mi vida en particular, a partir de ahora, sin descuidar otros casos que también ha sido importante mantener.
— ¿Qué lo llevaría a dejar la defensa de la presidenta?
Yo tengo un código de ética profesional, el código de ética de cualquier abogado le permite una renuncia cuando el abogado prueba que su cliente le está mintiendo, que no le es sincero, o que la confianza se ha roto. Voy a defenderla a ella sin descuidar los otros casos del estudio y sin descuidar la docencia, también.
Mi respuesta a tu pregunta: me parece que esto sí debe investigarse, pero no debe perseguirse; esa es la gran diferencia. Respecto a esta investigación de la presunta orden de mi clienta para desactivar el equipo policial en apoyo al EFICCOP; también debe investigarse. Pero también deben defenderse y también deben respetarse y deben, además, objetivamente archivarse, si consideran que no hay. Y no porque se trate de la presidenta, prefiero mi cargo, prefiero mi puesto, mi prestigio como fiscal, sigo investigando cuando objetivamente sé que no hay caso.
Me parece que los fiscales se arrinconan de casos porque no son reflexivos consigo mismos, se lo digo con todo respeto. Hay casos que merecen llevarse hasta el final, sin embargo, hay otros que no tienen ningún norte; me parece que deben ser mucho más generosos y pacientes.
— ¿Considera que los casos que ha asumido con la presidenta son de los primeros o de los segundos casos?
Considero que hay persecución, debe haber investigación.
— Pero la Fiscalía es una entidad persecutora de justicia.
Es que esa es la diferencia, el fiscal investiga, no persigue. Porque cuando lo hace está persiguiendo al ser humano, no al delito. ¿Cuándo el fiscal pierde su objetividad con justa razón? Cuando acusan, porque luego de toda su investigación ha resuelto de que esta persona merece ir a juicio.
Hace bien la presidenta en defenderse, hace bien en contratar, independientemente de mi defensa, al abogado que la defienda, y hace bien que la presidenta quiera declarar, porque insisto que hay lecturas que se leen en voz alta. La presidenta, además de mi recomendación, me dijo que quería declarar.
— Ella ha mostrado reticencia a declarar a inicios de las investigaciones.
Claro, es algo que se debe recalcar: cuando uno se acoge a su derecho al silencio, se está acogiendo a la norma. No es una falta de respeto a la autoridad, a la prensa ni al derecho.
— Pero, postergar citaciones, solicitar la presencia de la Fiscalía en el en el Palacio…
El permitir que la Fiscalía vaya a Palacio es una prerrogativa legal.
— Sí, pero también se puede entender como una manera de aplazar o de obstaculizar la investigación.
De ninguna manera, porque si la Fiscalía va, se ejecuta su declaración.
— ¿Y qué tanto problema hay en que la mandataria vaya a la Fiscalía?
No hay ningún problema, mientras la norma lo permita. Cuando una persona no declara, no es porque necesariamente tenga algo que mentir. Sino que una cosa es estar frente a un sacerdote que ante un fiscal en una reunión, cuando sabes perfectamente que lo que vas a decir lo van a exhibir 10 minutos después como lo que pasó en el caso de los Rolex. La presidenta, aún con otra defensa, estuvo cinco horas hablando.
Treinta minutos después, se filtra la información. Así nadie va a declarar. Así como las fuentes periodísticas y las preguntas cómodas o incómodas, hay que respetar el secretismo y la reserva de la investigación. Yo le he dicho a la presidenta: si es que se ventila su comunicación del día martes, nunca más declara, bajo mi decisión.
Porque si vamos a exponerla, sería ante el fiscal. Porque no se le falta el respeto ni a usted, ni a Portugal, ni a Espinoza, ni a Guzmán, ni a tu apellido; los derechos humanos no tienen rostro y las investigaciones deben ser reservadas. Y por eso es que ella medita mucho para declarar, porque se difumina y desintoxica su manifestación. Sin embargo, ahora hemos hecho sacerdocio con ella y hemos decidido que sí lo va a hacer.
— Aún así, existe la amenaza de que si se dan filtraciones, ella se va a rehusar a declarar…
Es que no deberían existir las filtraciones en un sistema adecuado.
— Yo le pregunto a usted porque lo que me acaba de decir es que no volverá a declarar si se da.
La presidenta siempre quiere declarar, pero también, como su abogado, debe respetarme. Le dije a la presidenta que sí, que lo haga. Y no creo que se difunda porque el fiscal que está a cargo de la investigación es una persona correcta, es muy incisivo en sus preguntas.
Con Harvey Colchado también tuvimos bastante reticencia, es parte de la dinámica de la audiencia. Pero si no se van a respetar las reglas de juego con la presidenta de la República, nos acogemos al derecho al silencio
— Usted ha señalado que la mandataria siempre quiere declarar, ¿por qué no a la prensa?
Como yo soy su vocero legal, la presidenta debe ocuparse de su gestión durante los años que le restan; y yo, de sus asuntos legales. La presidenta no puede convertir su mundo en sus problemas legales. Para eso contrata a un abogado
— Claro, pero existe también la capacidad de respuesta de ella…
Es verdad, quizás en algún momento, como cuando dio una conferencia de prensa en el caso de los Rolex, ella misma declarará. Pero mientras tanto, yo soy su vocero legal, así que soy yo quien va a declarar.
— Hablemos de esa última declaración porque es con base en esta de que se extendió la investigación por cohecho. Entonces, ¿considera que la presidenta se encuentra en la capacidad de poder declarar respecto a los Rolex?
Sí, claro, Rolex declaró.
— Me refiero a nivel de prensa, ¿puede responder respecto a las investigaciones en su contra?
Absolutamente convencido de que sí. Quizá buscaremos el momento pero mientras tanto, le he dicho a la presidenta que aún no.
— ¿Por qué no hacerlo ahora?
En algún momento me ha pedido declarar (ante la prensa). Yo le he reiterado que será cuando yo lo decida; y ella respeta la decisión de su abogado. La defensa de una presidenta tiene múltiples aristas. Si de un ciudadano sin poder se tergiversa, se intoxica y se utiliza perversamente esa información, con mayor razón en el caso de la jefa de Estado.
(Dina Boluarte) está preocupada pese a que es más sencillo construir inocencia y verdad, a no hacerlo. Por eso, también la defensa de nuestra parte está tranquila.
— Vuelvo a preguntar: ¿por qué no ahora?
Porque yo lo he decidido, ya buscaremos el momento de hacerlo.
— Y mientras tanto, evita conversar con los medios de comunicación…
Mientras tanto, se concentra en la política y las gestiones públicas que ella desarrolle. Insisto: la presidenta está para gobernar, no para reducirse y ocuparse todos los días de las investigaciones.
— Es su responsabilidad responder a la población. Y tengamos en cuenta que los periodistas hacemos las preguntas que la población debe escuchar.
Sí, cómo máxima mandataria debe hacerlo; y también como máxima mandataria, respeta las instituciones y los foros para declarar. Ha acudido cada vez que la han convocado, incluso soportando largas sesiones. La presidenta ha demostrado resistencia y seguirá haciéndolo porque representa a la institución. No se trata de un programa deportivo o político, sino del Ministerio Público, donde debemos entregar la información.
— Claro, pero hace más de un año que no le ofrece una entrevista directa a algún medio de comunicación.
Habría que corroborarlo, esa información no la tengo; pero mientras yo sea su abogado, yo soy soy su vocero legal, y si en algún momento, ambos salimos, seguramente ustedes tendrán esa primicia.
— A lo que yo voy es eso. ¿Por qué no hablar con la prensa?
Porque soy su vocero legal, yo transmito la información sobre ese tema.
— Y usted no desea que ella salga a hablar…
Por el momento, no. Como abogado, es mi decisión. Podrán cuestionarla y decir que evito que la máxima mandataria, la primera responsable, lo haga, pero que las críticas sean hacia mí. La presidenta es mi clienta, y ella escucha.
— Hay un proceso más que está que está realizando en contra de la mandataria y esta sí es una acusación constitucional que se dio a finales de año por crímenes de homicidio calificado de violaciones de derechos humanos, ¿también asume la defensa de ese caso?
No estoy en esa defensa, solo me ha encargado esa defensa. No hemos hablado acerca de ese caso.
— Vuelvo al tema de la demanda competencial esto podría beneficiarla; hasta cierto punto, porque es una acusación que está en ciernes.
Es muy sugerente, la pregunta pareciera que señala beneficiarla como si fuese una situación irregular y la mandataria, a través de los ministros que están a cargo del Gobierno en nuestro país han decidido presentarla porque constituye una acción legal.
— Es para defender a la institución a la presidencia, o para defender a Dina Boluarte.
Es para defender la interpretación perversa que se viene dando a nuestra carta política. Y si esto lo consideras como un beneficio hacia atrás, seguramente. Pero es (un beneficio) principalmente para los que la sucedan hacia adelante.
— Bajo esta línea, usted está de acuerdo con la postura inicial de la fiscal Zoraida Ávalos, quien se rehusó a realizar las investigaciones correspondientes en su momento, motivo por el cual fue inhabilitada.
Respeto a la norma número uno de este país. Respeto a la Constitución, respeto a la Carta Política; y me parece que han ultrajado la Carta Política de manera conveniente, de manera política.
— Pero esta interpretación vino por parte de la exfiscal destituida Patricia Benavides.
En el caso de tu respuesta yo considero que ni Pedro Castillo debió ser investigado; que quizás pudo haber cometido algún delito, pero eso no significa que los modos y las formas, según nuestra cláusula constitucional; le hayan permitido a la fiscal investigar.
Dado que existen dos resoluciones judiciales autorizando la investigación, debemos defendernos. Si las reglas cambian, pediremos otra interpretación, pero mientras tanto, acatamos la decisión judicial, nos guste o no.
— La postura del Congreso va en contra a la suya, teniendo en cuenta la inhabilitación de la doctora Zoraida Ávalos.
Sí, seguramente, pero este tema lo resolverá el Tribunal Constitucional. Creo que el Pleno lo hará de forma reflexiva, no subordinando la Constitución a un proceso penal, sino analizando el proceso penal dentro del marco constitucional.
— Me imagino que usted conoce quiénes escogieron a los integrantes de este Tribunal Constitucional; y la interpretación del Congreso es que sí se investigue.
Es fundamental reflexionar mucho en este caso. Considero incorrecto que los jueces sean elegidos políticamente. Ninguna decisión judicial debe tener un sesgo político, aunque esto me cueste decisiones o clientes. No podemos caer en la falacia de la falsa equivalencia, pensando que porque son elegidos políticamente, responden a intereses políticos. Estoy seguro de que, al ingresar al Tribunal Constitucional, los magistrados se convierten en jueces constitucionales de la República. Esperemos que ellos resuelvan este asunto.
— Las últimas decisiones del Tribunal Constitucional han coincidido con la mayoría política del Congreso, ¿cómo cree que será la próxima decisión de este, considerando este patrón?
Las decisiones previas no siempre tuvieron la misma conformación de magistrados. Si fuera la misma, entendería la preocupación. Sin embargo, el Tribunal Constitucional ha mostrado mucha reflexión en sus decisiones, como las a favor del expresidente Fujimori, que le dieron un sentido normativo y no político a su vida. Esto me parece una decisión valiente.
La decisión sobre los peajes, con la nueva conformación del tribunal, es valiente. Creo que habrá algunos votos discordantes. En su reflexión, el Tribunal Constitucional debería determinar que un presidente no sea investigado durante su mandato.
— Cuál es percepción que usted tiene tener sobre temas de abusos.
Estoy en contra. Yo estoy a favor de que salgan por cualquier tipo de indulto, no estoy de acuerdo con que se les reduzca la pena a determinados delitos.
— Respecto al señor Fredy Díaz. ¿Usted en la actualidad se encuentra defendiéndolo?
Sí, el estudio se encuentra defendiéndolo y yo también, por supuesto. Recientemente acabo de salir de una audiencia.
— ¿La presidenta sabía que usted defiende al señor Freddy Díaz? Porque notamos que quien habla con los medios es el señor Renzo Córdoba, no usted específicamente; aunque en cuestiones procesales usted está directamente involucrado.
Quiero hacer una precisión. No me gusta ufanarme de aquello que no hago. Yo soy muy respetuoso con mis colegas. ¿Por qué salió el doctor, que desde hace seis meses no forma parte de este estudio? Es porque él estuvo en esa audiencia de prolongación de prisión preventiva, no yo, y, él conocía los detalles de ese caso.
— Nunca antes se le ha visto con el señor Freddy Díaz…
Públicamente sí he asumido la defensa desde la etapa intermedia, he participado en un 50% de las audiencias. Nunca me han convocado a hablar sobre ello.
— Bueno, las audiencias también son reservadas, yo me refiero a frente a cámaras.
Nunca me llamaron para hablar sobre él. La única vez que me contactaron fue de RPP para discutir la prolongación de la prisión preventiva, y en ese momento fue Renzo Córdova quien habló. Hasta ahora, no me han llamado para hablar sobre su caso, de lo contrario, lo haría con gusto. Si es sobre una audiencia actual, yo estaría disponible; si es sobre la del martes pasado, sería Luis Castro quien participaría.
— Insisto: ¿la presidenta sabía acerca de esto, de que defendía a congresistas acusados de violación?
Es una información que queda entre ella y yo. La presidenta sabe de mis defensas a nivel de los funcionarios públicos.
— Entonces, no sabe del caso de Freddy Díaz.
No afirmé eso; es lo que ustedes quieren escuchar. Si hablara de todos los casos que discutimos, tendría que involucrar a terceros. Mi relación con la presidenta es distinta y profesional. Ella conoce mis experiencias y sabe que alguien con experiencia, joven o no, debe defenderla.
— Usted me señaló hace unos minutos que era un abogado especializado en temas de corrupción de funcionarios; por qué tomar un caso de abuso y delito sexual, como el de Freddy Díaz.
Aún no ha sido sentenciado. Para mí, es inocente.
— He señalado que se trata de un caso de abuso y delito sexual…
El que usted lo considere así, no significa que así lo sea.
— ¿Qué imputaciones existen contra Freddy Díaz?
Son casos de violación sexual que resolverá el Poder Judicial. Los medios difunden información superficial, no de contenido. Respeto su apreciación, pero es especulativa. Defender a alguien que considero inocente no es impropio; al contrario, es una labor noble de nuestra profesión defender a personas injustamente investigadas.
No omití en la información que proporcioné. Dije que el 80% eran delitos contra la administración pública y mencioné que el 20% correspondía a delitos de criminalidad común, entre los cuales se encuentra este caso, junto con otros.
— En qué sentido se le hace interesante el caso de Freddy Díaz como para asumir su defensa…
Porque me gusta la justicia, no el ajusticiamiento.
— ¿Su percepción es que él es inocente?
Sí.
— ¿Por qué?
Los casos de esta naturaleza son sensibles y difíciles, no los asumo por prestigio, sino por la delicadeza de la prueba y su impacto en las víctimas. Solo los tomo cuando estoy absolutamente convencido de la inocencia.
— ¿Y las denuncias, las acusaciones, los videos, los partes policiales y todo lo demás?
Me gustaría decirte muchas cosas que suceden en el juicio y contradicen lo que afirmas, pero no puedo porque respeto la privacidad del caso y a la señorita que se considera víctima. Será el Poder Judicial quien decida. Mi cliente se considera inocente y será el Poder Judicial quien, al final, decida.
— Hablemos de Adriano Pozo, en todo caso. Es un juicio ya cerrado que asumió.
En el caso de Adriano Pozo, yo asumí su defensa convencido de su inocencia y efectivamente cuando y estuve en juicio, logramos su absolución del delito de feminicidio y del delito de tentativa de violación sexual.
— Existe un video, doctor, que remeció la sociedad peruana, donde se ven sus acciones
No sé si para la sociedad peruana, pero como te he repetido, que para ti sea impactante no significa que lo sea para todos. Simplemente intento señalar que esta es otra imprecisión.
— ¿Señala que es falso lo que se vio?
Esa imagen donde él injusta y cobardemente agarra a su exenamorada y la jala por el hotel es un acto condenable. Se lo dije, eso no hace con nadie. Pero eso no fue parte del juicio, eso fue parte de una discusión que pasó en la habitación.
Ese caso llegó a juicio y durante mi defensa logramos su absolución de ambos delitos. Lamentablemente, en Lima Norte se estableció una política de casi tres sesiones por semana, similar a la época de Fujimori, con sesiones los lunes, miércoles y viernes. Mi trabajo no se puede limitar únicamente a ese caso.
— Ahora se encuentra prófugo.
Sí. La Corte Suprema determinó su condena por el delito de tentativa de feminicidio, y lo absolvió por violación sexual.
— Entonces sí quedó acreditado.
Mientras yo estuve en la defensa, no.
— En su momento usted señala que sí, pero la justicia ha determinado una cosa.
La justicia determinó que hubo un delito tentativa de feminicidio y yo respeto las decisiones judiciales.
— Doctor, ¿cuál es su opinión respecto a la lucha contra la violencia a la mujer?
Es una protesta absolutamente legítima. Me parece muy bien que se hayan creado legislaciones a favor.
— Pero en los casos polémicos que ha tomado, como el de Adriano Pozo, que implica abuso, no reciben la misma opinión.
Eso no es incompatible. Defiendo a víctimas de violación sexual en el estudio porque consideramos que hay delito. En esos casos no lo consideré así.
— Qué lo lleva a considerar que hay delito o que no hay delito, ¿que sea su cliente?
La evidencia principal no son las imágenes, sino la actividad probatoria. Esa imagen es cobarde y constituye un delito. Agredir a alguien de esa manera se considera lesiones. La Fiscalía no estaba investigando por lesiones; me tomé cerca de tres meses para direccionar sobre este caso.
— ¿Se arrepiente de haber defendido al señor Adriano Pozo?
De ninguna forma. No me arrepiento de ninguna defensa que hasta este momento he asumido.
— Y no cree que exista una incompatibilidad de discurso entre las acciones y lo señalado por la presidenta, quien se jacta mucho de este tema, ser la primera presidenta mujer, luchar en favor de las mujeres, de protegerlas; y los antecedentes que usted tiene, e incluso afirma la inocencia de algunos, pese a la actividad probatoria, como en el caso de Adriano Pozo.
Este año, he defendido cerca de tres víctimas, además de muchas otras que son atendidas por el estudio de manera gratuita, como parte de nuestra responsabilidad social. Más que incompatibilidad, hay coherencia.
Sé el primero en comentar en"Abogado de Dina Boluarte: “Si se ventilan sus comunicaciones, nunca más declarará ante la Fiscalía”"