A poco más de 100 días del inicio de su administración, un 78% de los mexicanos aprueba la gestión de Andrés Manuel López Obrador como presidente, pero hay un lugar de la República donde su popularidad no es tan arrasadora.
El mandatario fue declarado persona “non grata” en Morelos por una centena de organizaciones de pueblos originarios, campesinos y sociales, reunidos hace una semana en Amilcingo.
La Asamblea Emergente Nacional ante la Violencia de Estado y la Autodeterminación de los Pueblos, acusó al político tabasqueño de incumplir su palabra empeñada en 2014 sobre no afectar los intereses de las comunidades con megaproyectos gubernamentales como la Termoeléctica de Huexca.
La construcción del proyecto energético ha generado una división estatal entre organizaciones civiles y autoridades por años. El momento más álgido del conflicto se registró el 20 de febrero, días antes de que se llevara a cabo la consulta ciudadana que terminó con la aprobación de los trabajos para realizar la termoeléctrica.
Samir Flores, integrante del Proyecto Integral Morelos (PIM) y uno de los rostros más visibles de los opositores a la termoeléctrica, fue asesinado a las afueras de su domicilio en Amilcingo.
Flores era un activista que se oponía a otros megaproyectos como el gasoducto que atraviesa la zona volcánica del Popocatépetl y un acueducto que comprometía el abastecimiento de agua para ejidatarios morelenses.
La asamblea exigió el esclarecimiento de los hechos y justicia para los familiares de Flores. De la misma forma, convocó a una movilización nacional e internacional en Chinameca el 10 de abril.
“No permitiremos que la muerte de nuestro caudillo del sur sea insultada con la presencia de quien busca impulsar los proyectos de muerte en tierra zapatista”, declaró la asamblea.
Las agrupaciones sociales exigieron la destitución del delegado en Morelos, Erick Hugo Flores y aseguraron que hay una estrategia para dividir al pueblo con los megaproyectos.
La figura de Emiliano Zapata en Morelos cobija a los campesinos y ejidatarios. López Obrador se acercó a la familia del caudillo revolucionario y al inicio de su mandato los presentó en su conferencia de prensa matutina, sin embargo en el transcurso de su administración se han distanciado.
Jorge Zapata, nieto del revolucionario, impugnó ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, la consulta de la Termoeléctica en Huexca.
Los resultados de la consulta, cuestionada por organizaciones civiles, dio la razón al presidente y el proyecto va a continuar con la venia de la administración federal, sin embargo la resistencia advirtió que seguirá en pie de lucha y el presidente encontró un bastión en contra de su aparente indestructible popularidad.
FUENTE: INFOBAE NOTICIAS
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