Películas de terror: ¿por qué algunas personas disfrutan más de la sensación del miedo que otras?

Exorcismos, caníbales, actividades paranormales, maldiciones y payasos malvados son algunos de los protagonistas de las historias más aterradoras que provocan pesadillas y escalofríos en audiencias de todas las edades. En el marco de Halloween, las películas de miedo se convierten en el atractivo principal de la celebración moderna. Además del fanatismo estacional, desde sus orígenes estas historias permanecen en la mente de aquellos que las consumen durante días, semanas o años.

Pero, ¿por qué algunas personas disfrutan más de la sensación de miedo que les provocan que otras? Según una investigación que llevó a cabo el sitio de farmacias en línea Treated.com, no se sabe con exactitud, ya que probablemente la respuesta recaiga sobre la profundidad de cada personalidad. “La partes del cerebro que generan el miedo y el placer están estrechamente relacionadas, y esto puede ser por lo que algunas personas disfrutan más que otras de la sensación de terror cuando ven una película”, aseguran los investigadores.

Para la psicóloga Beatriz Goldberg, existen personas que sienten un placer especial cuando se encuentran en situaciones de riesgo. “Se hacen visibles tres actitudes frente a esta experiencia: las de aquellos que lo disfrutan por completo; quienes lo hacen a medias y prefieren controlar lo que ven y lo que no, como si pudieran hacerlo en la vida real; y por último quienes las evitan por completo”, sostuvo en diálogo con Infobae. 

Ver una película de terror también puede tener un efecto significativo, aunque temporal, sobre el funcionamiento del cuerpo humano. Por eso, el doctor Daniel Atkinson, jefe de los servicio médicos del sitio en línea, creó una línea del tiempo en la que se explican los procesos que atraviesa el cuerpo durante la experiencia.

Antes de que comience la película 

Ir al cine a ver una película de terror puede ser bastante relajante y placentero previamente al comienzo del film. “Elegir nuestra bebida y snacks favoritos mientras charlamos con amigos son algunas de las actividades que harán que el ritmo del corazón se mantenga estable y exista una sensación de excitación sobre lo que viene a continuación”, aseguró el experto.

Durante los primeros 20 minutos 

A medida que se construye la historia el cuerpo puede comenzar a mostrar signos de ansiedad leves ya que anticipa que algo malo va a pasar. Una película de terror que sigue una estructura narrativa convencional hará que el corazón del público se acelere en los diez primeros minutos de película. Una escena escalofriante causará un repentino “subidón” de miedo, y establecerá el tono para que la audiencia permanezca alerta a lo largo de toda la película.

En respuesta, el sistema nervioso simpático del cuerpo aumentará los niveles de cortisol y adrenalina que se bombean alrededor del cuerpo. Las hormonas de respuesta “lucha o huida” preparan al cuerpo para circunstancias extremas, en caso de que tenga que reaccionar rápidamente en cualquier momento.

El pulso y la respiración aumentarán para asegurarse de que el cuerpo esté preparado para la acción, tanto de huida como de permanencia. Las pupilas se dilatarán para incrementar la sensibilidad y ensanchar la visión para que cualquier posible peligro se identificado con facilidad.

A partir de los 20 minutos y hasta los 70

A continuación, la historia tendrá como objetivo crear subidas y bajadas de ansiedad y anticipación a medida que se desarrolla cada escena. Se crearán diversos picos pequeños de miedo, ya que la película utiliza varias técnicas, entre ellas los falsos saltos de susto. Este método narrativo lleva a pensar que se está a punto de encontrar con algo realmente aterrador y en su lugar resulta ser algo totalmente normal en el último instante.

Experimentar hiperhidrosis palmar, más comúnmente conocida como manos sudorosas, otro proceso desencadenado por el sistema nervioso simpático, es moneda corriente en estas situaciones. “Las palmas de nuestras manos -sostuvo el especialista- contienen muchas glándulas sudoríparas ecrinas que se activan cuando nos asustamos”.

Durante los últimos 20 minutos

Atkinson asegura que el clímax de la película probablemente provocará un aumento en los latidos del corazón, e incluso palpitaciones. Durante la reacción de “lucha o huida” antes mencionada, la sangre se aleja del intestino y en su lugar se dirige hacia los órganos esenciales, el cerebro y el corazón, lo que produce la sensación de palpitaciones.

“A medida que el factor de miedo aumenta, es posible que observes otras reacciones, como que se te pongan los pelos de punta, también conocido como piel de gallina o piloerección. Se piensa que está reacción está vinculada a nuestros instintos animales ancestrales”

Una vez que la película concluya, el público sentirá una inmensa sensación de alivio. Es posible que incluso hayan contenido la respiración en puntos cruciales y, por lo tanto, tomen una gran cantidad de oxígeno.

Inmediatamente después de finalizar la película

Llegado el final de la historia será necesario un corto período de tiempo para que el cuerpo vuelva a reclimatarse, ya que el cerebro es capaz de distinguir rápidamente entre lo que es real y lo que no lo es. Por lo tanto, una frecuencia cardíaca normal debe restablecerse con bastante rapidez.

Todos los procesos enumerados anteriormente pueden potencialmente quemar energía y hacer que los miembros de la audiencia se sientan un poco fatigados. Sin embargo, la ingesta de snacks dulces o salados retrasará el efecto mencionado.

Los snacks tradicionales del cine suelen tener un alto contenido en azúcar o sal. Ver una historia aterradora hace más probable la ingesta desmedida de una mayor cantidad de alimentos. La cafeína y el azúcar que se encuentran en algunas bebidas gaseosas y alimentos pueden causar en el cuerpo una sensación de agitación y nervios. Esta combinación podría contribuir a una mala noche de sueño.

“Además, el consumo de productos como papas fritas y nachos, entre otros snacks y bebidas gaseosas azucaradas, son contribuyentes al aumento de peso de las personas, además de alterar los valores de glucemias y perfiles lipídicos que ponen en riesgo la salud”, sostuvo en diálogo con Infobae la nutricionista Delfina Fahey.

La Organización Mundial de la Salud sugiere limitar el consumo de azúcar a 50 gramos por día. Por su parte, el consumo moderado de cafeína no demostró ocasionar efectos en la glucemia de las personas pero si el de azúcar ya que al ser metabolizado rápidamente eleva los niveles glucémicos sanguíneos. Por esta razón se sugiere disminuir el consumo de este último componente presente principalmente en gaseosas, golosinas, snacks, panes y productos de pastelería. 

Además, el contenido aterrador de estas películas puede infiltrarse en los sueños, y en ocasiones puede impedir el descanso profundo por las noches. Es por eso que los efectos de una película de terror pueden tener un mayor alcance de lo que se pensaba inicialmente.

Sin embargo, ver películas de terror puede ser una experiencia memorable, emocionante y divertida; y una gran ocasión social para disfrutar con amigos. Y hay pocas cosas tan excitantes como disfrutar de una película de terror en Halloween, pero vigilar el consumo de azúcar y snacks mientras se disfrutan puede ser una gran idea.

SEGUÍ LEYENDO: 

Una guía con las mejores ideas para festejar Halloween en Buenos Aires

Dónde festejar Halloween en Buenos Aires

FUENTE: INFOBAE NOTICIAS